La titular de Abuelas había dicho que el gobernador sería un “presidente de transición” a la espera del regreso de Cristina. Disculpas, abrazos y el discurso del “Chino” a los intendentes
La cita tenía un tinte bien a pedir de boca de Daniel Osvaldo Scioli: deporte y Mar del Plata.
El rubro predilecto del ex motonauta y la ciudad que elige el candidato presidencial fueron el lugar donde se dio arranque a los “Juegos BA”, con deportistas más intendentes bonaerenses.
Hasta ahí, todo habitual en la vida política de Scioli; los agregados eran tal vez en esta oportunidad dos kirchneristas rabiosos que tuvieron su rol y su momento. Carlos Alberto Zannini, hoy compañero de fórmula del postulante presidencial, y Estela de Carlotto, titular de Abuelas de Plaza de Mayo y quien había abogado pocas horas antes por un presidente de transición a la espera del regreso de Cristina al poder.
La presencia de Carlotto se debía a que la Abuela es la madrina vitalicia de los Juegos BA. Además, su hijo Guido Carlotto es funcionario bonaerense: es secretario de Derechos Humanos provincial y suena para el futuro Ministerio de Derechos Humanos en un eventual gobierno nacional sciolista.
Scioli llegó este martes a Mar del Plata y habló, para encabezar delante de casi 17 mil jóvenes de toda la provincia de Buenos de Buenos Aires que colmaron el Estadio Polideportivo Islas Malvinas de Mar del Plata.
El candidato oficialista se rodeó de deportistas como las ex leonas Jorgelina Bertoni y Carla Rebecchi, Carlos "Chapa" Retegui, Sebastián Crismanich, Walter Pérez, Nora Vega y el ex rugbier Serafín Dengra, entre otros.
Luego, bajó del escenario junto al secretario de Deportes de la Provincia, Alejandro Rodríguez y le pidió que reuniera a los intendentes presentes. Rodríguez tenía un sector VIP armado y hacía allí, marcharon los casi 30 intendentes presentes, con presencia mayoritaria de la Quinta Sección electoral.
En ese momento, Scioli se cruzó con Carlotto. La madrina vitalicia de los Juegos BA se acercó al candidato al que había condenado -con sus declaraciones- a ser apenas una transición a la espera de Cristina y se abrazaron.
Scioli le tomó la mano y escuchó: “No, pero Daniel, yo te quería decir...”
Pero el candidato, sin soltarle la mano, retrucó diplomático y afectuoso: “No Estela, ni me lo expliques...”. A centímetros observaban, como se ve en la foto, Carlos Zannini y el intendente y fallido candidato a vicegobernador Fernando Espinoza.
El momento fue interrumpido por “Chino” Zannini quien se dirigió a la Abuela de Plaza de Mayo: “Estela, Daniel no es transicional porque yo no soy transicional”, soltó con una sonrisa el hombre elegido por Cristina para completar la fórmula presidencial.
Luego, siguieron risas entre Scioli, Carlotto y Zannini y la mujer se retiró con el asunto saldado. Entonces, los integrantes de la fórmula K se dirigieron al VIP que había armado Alejandro Rodríguez y la cosa se tornó más “peronista”, con una bajada de línea para sumar votos con vista a octubre.
Scioli habló primero y le dio paso a Zannini. Allí, “Chino” dio un discurso más teórico. Ambos intentaron mostrar sintonía entre ellos y pidieron a los intendentes que jueguen “un poquito más”, apoyo explícito a la fórmula y “garantizar certidumbre y no entrar en el barro que propone el PRO”. Miraban atentos Fernando Espinoza, de La Matanza, y Jorge Ferraresi, de Avellaneda.
“Estamos ganando en primera vuelta. Pero hay que sacar una diferencia mayor”, dijo Zannini. Los presentes escucharon después que la actual proyección de una diferencia de 11 puntos sobre Mauricio Macri debía ampliarse a 13 puntos, para evitar suspicacias y la “Tucumanización” del escrutinio nacional.
Así finalizó esta cumbre en Mar del Plata, donde el abrazo Scioli – Carlotto y las arengas para sumar voluntades fueron las instantáneas que se llevaron a sus pagos los intendentes y dirigentes en la vuelta a sus pagos.
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