También le hicieron planteos por obras y fondos para seguridad. El gobernador pidió apoyo de legisladores UCR a dos proyectos relativos a Salud.
Por Damián Belastegui,
Los intendentes bonaerenses del radicalismo mantuvieron este martes más de tres horas de reunión con Axel Kicillof. Más allá de la multiplicidad de planteos, la preocupación central pasó por el panorama crítico que atraviesan los sistemas de salud locales.
Como contó LPO, el aumento de la demanda en los hospitales municipales y el fuerte incremento en el valor de los insumos ya absorbe más del 40% del presupuesto de algunas comunas.
Con esa foto, en el foro radical decidieron empujar un proyecto para frenar la escalada de precios en los remedios. Se trata de una iniciativa inspirada en la "Ley Oñativia" sancionada en 1964 durante el gobierno de Arturo Illia, la cual fijó una política de precios para los medicamentos.
Los jefes comunales de la UCR consideran la disparada en los valor de los medicamentos el nudo central de la asfixia a sus finanzas. Por eso, además de promover esa ley con sus legisladores, le pidieron a Kicillof que interceda con los bloques de Unión por la Patria en el Congreso para que acompañen ese proyecto.
"La caída del acuerdo de precios de medicamentos nos pone en una situación muy compleja. Es un combo: las obras sociales no funcionan, el poder adquisitivo está destrozado y los precios de los medicamentos subieron desde 300 a 1.500%", dijo a LPO el titular del Foro de Intendentes UCR, Maximiliano Suescún (Rauch).
Como las obras sociales han dejado de cubrir medicamentos y atenciones, cada vez viene más gente al hospital municipal
Uno de los principales impulsores es el intendente de Tandil, Miguel Lunghi, que cuestionó la desregulación propiciada por el gobierno de Javier Milei: "Los medicamentos están incomprables. No se pueden desregular los medicamentos", dijo.
En esa línea, el tandilense describió: "La ampolla para tratar un infarto de miocardio valía 600 mil pesos, hoy está 2.860.000 pesos. Un broncodilatador que estaba 1.000 pesos, hoy está 17.000. Todos los medicamentos están así".
Por su parte, el intendente de Viamonte (Los Toldos), Franco Flexas, admitió a LPO: "Se está abriendo casi un presupuesto aparte para eso y no solo para los medicamentos, sino también la utilización de todos los recursos para salud. Como las obras sociales han dejado de cubrir medicamentos y atenciones, cada vez viene más gente al hospital municipal".
La ampolla para tratar un infarto de miocardio valía 600 mil pesos, hoy está 2.860.000 pesos. Un broncodilatador que estaba 1.000 pesos, hoy está 17.000. Todos los medicamentos están así
Ante ese planteo, Kicillof también pidió a los intendentes radicales que intercedan ante sus legisladores bonaerenses para que acompañen dos proyectos que el Ejecutivo no logró filtrar en diciembre pasado con la discusión impositiva: la creación de una empresa de emergencias médicas y un laboratorio farmacéutico.
"Nos comprometimos a estudiarlo. Si vemos que eso es una solución para algunos de los problemas que tenemos, planteárselo a nuestros legisladores", dijo Suescún, que adelantó que con el gobierno provincial acordaron mesas de trabajo para el seguimientos de temas como éste.
En materia de infraestructura, durante la reunión con Kicillof se planteó el compromiso de ir terminando en el primer semestre con las obras con fondos provinciales de 2023 e ir rescatando algunas nacionales. Para el segundo semestre, se habló de avanzar con nuevos planes de obra. Los radicales plantearon un Fondo de Infraestructura Municipal 2024.
En seguridad, el Intendente de Balcarce, Esteban Reino, pidió un nuevo acuerdo para las inversiones en equipamiento, infraestructura y combustible de la Policía Bonaerense.
Más tarde, varios intendentes del foro se reunieron con el titular del comité nacional, el senador Martín Lousteau, para que impulse la discusión del proyecto de tope de precios a medicamentos en el Congreso.
Además, le plantearon que, de abordarse el capítulo de Ganancias, se mantenga la exención para guardias médicas. "Esa exención había resuelto el problema que teníamos y, si otra vez la vuelven a poner, nos vamos a quedar sin guardias en los hospitales del interior", alertó Flexas.
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