A los intendentes bonaerenses no les convence tener que dirimir la conducción partidaria a nivel provincial en las urnas. Cuando La Tecla consultó a casi una veintena de alcaldes radicales de la Provincia, todos coincidieron en que las internas, palabras más palabras menos, van en detrimento del partido.
Uno de los alcaldes fue muy conciso al describir el momento que vive por estos tiempos la UCR en territorio bonaerense: “Finalmente se confirma el dicho de que donde hay dos radicales, hay una interna”.
En diálogo con este medio, otro mandatario municipal, Walter Santalla (intendente de Ramallo y dirigente radical perteneciente al espacio de Gustavo Posse), aseguró que “era necesaria una lista de unidad. La interna ésta tiene más que ver con cobrarse algunas cuestiones personales o sectoriales que con un aporte productivo al partido; esto no suma absolutamente nada”. Y añadió que “seguramente la noticia, el domingo, después de los comicios internos, será la muy poca gente que votó y no quién ganó y perdió”.
Quien coincidió con este pensamiento fue el jefe comunal de Salliqueló, Osvaldo Cattaneo (alfonsinista): “No vamos a tener el eco de la gente. Pienso que la votación va a ser un fracaso”.
Por su parte, Miguel Gargaglione (alcalde de San Cayetano) no ve con buenos ojos la candidatura de su par Juan Gobbi: “Tendría que haber salido un candidato por consenso y que no fuese intendente. A mi entender, Gobbi es uno de los mejores intendentes que tiene la UCR, y sería muy importante que fuese el presidente del foro de intendentes ra-dicales, pero no el presidente del partido a nivel provincial, porque actualmente lleva mucho tiempo ser jefe comunal”.
Comentá la nota