por Stella Gárnica

El anuncio de Cristina Kirchner de correrse de cualquier candidatura en 2023, dejó en estado de debate interno al peronismo y por eso, los intendentes del conurbano ya desafían abiertamente el liderazgo de Máximo Kirchner. Lo reconocen como líder de La Cámpora y del PJ de la provincia de Buenos Aires, pero sin el poder de la lapicera para definir las listas de candidatos el año próximo, en el mayor bastión electoral del oficialismo.

Los intendentes del PJ del conurbano se preparan para dar la pelea electoral 2023 y retener el poder territorial en sus distritos y en ese marco, desafían a Máximo Kirchner y al gobernador Axel Kicillof: "Máximo es el líder de La Cámpora y el presidente del PJ, pero no es nuestro jefe, nuestra estrategia electoral la decidimos nosotros, tendremos que discutir todo y el que llegue mejor parado, será candidato", señalan los barones del conurbano.

Los intendentes encabezados por el titular de la FAM, Alberto Descalzo, Gustavo Menéndez, Andrés Watson, y el diputado Julio Pereyra (ex intendente de Florencio Varela), entre otros jefes comunales de la primera y tercera secciones electorales, anunciaron que llevarán ese mensaje a la vicepresidenta Cristina Kirchner, al presidente Alberto Fernández y al propio Kicillof.

Reclaman entre otras cosas, acelerar acciones concretas para atacar la inseguridad en el conurbano y controlar la inflación, las dos principales demandas sociales.

Aunque aclaran que "la provincia y los municipios están bien creciendo económicamente, con crecimiento industrial y del empleo formal, reconocen que la inflación carcome todos los logros del gobierno nacional y provincial, además de achacar a Alberto Fernández y a Kicillof, problemas por haber comunicado mal las cuestiones de gestión" de la pandemia y de la recuperación económica, frente a las críticas de la oposición y la judicialización de la política.

"Tenemos que hacer algo ya para mejorar la seguridad, la distribución de la coparticipación y sostener las obras públicas. Todos salimos a militar, ante la falta de un solo líder, al correrse Cristina, ahora la estrategia es salir todos a defender el modelo". La Cámpora y los movimientos sociales serán "uno más, en igualdad de condiciones".

En los distritos donde los intendentes están bien en las encuestas, pretenden armar las listas de unidad encabezándolas, y negociar lugares en los concejos deliberantes con los aliados. Pero no aceptarán más imposiciones, sostienen.

En la nueva etapa dicen, "Cristina con su mensaje de renuncia, abrió el debate". Hace un mes, como ocurrió en el multitudinario acto por el Día de la Lealtad en La Plata, o en el Congreso del PJ bonaerense en Mar del Plata, todos los intendentes -con sus diferencias- respondían a las convocatorias de Máximo Kirchner.

Kicillof no descarta desdoblar las elecciones en la provincia

Por su parte, antes de participar de la reunión con la liga de gobernadores del PJ, Axel Kicillof, apuesta a su reelección y no descartó adelantar las elecciones en la provincia, para despegarlas de una eventual derrota nacional del Frente de Todos.

El mandatario dio a entender días atrás que irá por la reelección. Sin embargo, entre los intendentes y la dirigencia toda reconocen que el armado electoral pasará en definitiva por la estrategia que la propia Vicepresidenta plantee. En este contexto, y a modo de reaseguro territorial, también asoma una idea de desdoblamiento electoral, como ya se planteó en otras provincias. “Estoy abierto a la discusión. He escuchado a sectores de un lado y del otro”, dijo Kicillof en una entrevista el fin de semana.

Nueve provincias ya modificaron su calendario electoral para desenganchar los comicios nacionales de los provinciales: Salta, Río Negro, Jujuy, Tucumán, Tierra del Fuego, Santiago del Estero, San Juan.

Un grupo al que se sumará Entre Ríos si el senado provincial le da sanción definitiva al proyecto de ley impulsado por el gobernador del PJ, Gustavo Bordet y que ya fue aprobado en Diputados.

Kicillof reconoció que en Buenos Aires el debate también está abierto, pero que modificar el calendario electoral en el mayor distrito electoral del país, dependerá de una negociación consensuada con la oposición, ya que el Frente de Todos no tiene mayoría en la Legislatura bonaerense.

“Observaba lo que ocurrió en varias provincias y la verdad que nosotros, para hacerlo, necesitamos una mayoría legislativa que no tenemos, porque es por ley (que hay que determinarlo). Por lo menos las PASO son simultáneas (con las nacionales). Así que necesitamos una mayoría, y en eso habría que encontrar un acuerdo con la oposición", admitió el gobernador.

El desdoblamiento de las elecciones locales de las nacionales surgió como parte de la estrategia que analiza el kirchnerismo para intentar separar las elecciones provinciales de las nacionales, con el objetivo de retener la provincia ante una eventual derrota electoral nacional en 2023.