En los municipios comenzaron los ajustes en los gastos ante la posibilidad de que escasee la ayuda de fondos nacionales; es una situación extendida entre los jefes comunales del peronismo, pero también impacta en los de Juntos por el Cambio.
Por: Javier Fuego Simondet.
En los distritos de la provincia de Buenos Aires, muchos intendentes activaron un operativo defensivo de achique de gastos, con el objetivo de enfrentar las restricciones que imaginan que les deparará el ajuste del prometido “plan motosierra” del presidente Javier Milei. Ante la posibilidad de que el flujo de fondos nacionales se interrumpa, en distritos del conurbano y también del interior provincial comenzaron a aplicar recetas de achique de erogaciones y a refugiarse en mantener los servicios básicos en funcionamiento. Si bien son los intendentes enrolados en Unión por la Patria los que aparecen más afectados, también hay ejemplos en Juntos por el Cambio.
En Esteban Echeverría, en el sur del conurbano bonaerense, el intendente Fernando Gray (Unión por la Patria) “se anticipó” al comienzo de la gestión de Milei, informaron fuentes del municipio. Entre otras medidas, suspendió exposiciones de fin de año organizadas por la municipalidad, como la edición de Expo Esteban Echeverría que se realiza en diciembre; eliminó pegatinas de afiches navideños y bajó de seis a dos los operativos diarios de salud. “Máxima austeridad, se están recortando todos los gastos para mantener los servicios básicos”, definieron en la comuna.
Según pudo saber LA NACION, Quilmes es otro de los distritos que encaran la nueva etapa política del país con reducción de gastos. El municipio gobernado por Mayra Mendoza, de Unión por la Patria y referente de La Cámpora, comenzó un proceso de achique en septiembre, que tenía previsto aplicar también si el ganador de la elección era Sergio Massa, por la dinámica inflacionaria. Consiste en reducción de estructuras y de gastos superfluos. El recorte queda ejemplificado en las últimas fiestas por aniversarios de ciudades del distrito, que fueron austeras, sin equipos de luces, sonido, ni grandes escenarios, pudo reconstruir este diario.
“Ya estamos con limitaciones financieras y programando un año próximo con austeridad”, indicaron, en sintonía, desde la Municipalidad de Moreno, donde gobierna Mariel Fernández, de Unión por la Patria y representante del Movimiento Evita. “Es algo generalizado”, aseguraron en otro municipio del Gran Buenos Aires sobre los planes de ajuste en las intendencias.
En Morón también esperan escasez de recursos. “Presentamos un presupuesto previendo las mismas políticas de gobierno y nuevas. En el presupuesto tenemos un porcentaje grande de fondos de Nación para obras, servicios, luminarias, recuperación vial. Los asfaltos, si se venían financiando con Nación, tendremos que pelearlos desde el municipio, porque la Provincia no va a poder afrontarlo”, dijo una fuente municipal del distrito que comanda el sabbatellista Lucas Ghi (Unión por la Patria). Advirtieron que, en caso de paralización de obras, los juicios de las empresas contratistas recaerán sobre la comuna, aunque los fondos sean nacionales. “Tenemos 50 obras activas, y 40 son de Nación”, alertaron.
En el interior bonaerense, también preparan ajustes. Con esa tónica prevé comenzar su gestión en Dolores el peronista Juan Pablo García, que cortó con su victoria 16 años consecutivos de gobierno de Camilo Etchevarren (Juntos por el Cambio, Coalición Cívica). “Las definiciones de Milei sobre la obra pública y el giro de recursos a las provincias ponen en estado de alerta algunos de los proyectos más ambiciosos del plan de gobierno de García, porque necesitan el indispensable apoyo nacional y provincial”, afirmaron desde el equipo del nuevo intendente dolorense a LA NACION. García eliminará la Jefatura de Gabinete, 16 cargos políticos, los vales de combustible para los autos particulares de los funcionarios y el pago de seguros con dinero municipal, entre otras medidas de recorte.
Las prevenciones ante el ajuste que promete Milei llegan a distritos ajenos al peronismo, como el caso de Tres de Febrero. “Estamos tomando diversas medidas de austeridad, recortando programas y también contratos. Priorizando lo esencial”, informaron a LA NACION en la intendencia que conduce Diego Valenzuela (Juntos por el Cambio, Pro).
En General Pueyrredón, donde gobierna Juntos por el Cambio con Guillermo Montenegro (Pro), destacaron que desde que iniciaron su gestión aplicaron reducciones de gastos, y reafirmaron que profundizarán esa senda durante la administración nacional de La Libertad Avanza. “Eliminamos 34 funcionarios políticos para este nuevo mandato. Si a eso se le suma la baja de un 20% de los sueldos de los cargos políticos, resulta una reducción del 50% del gasto en esos cargos. Y se los hizo renunciar a vacaciones pagas, con $150 millones de ahorro. Solo tenemos cuatro obras públicas nacionales en curso, venimos con un sistema privado de compensación”, subrayaron desde el municipio.
Si bien en la mayoría de los distritos afirmaron que no tienen un interlocutor definido para llegar a Milei, el más señalado para esa tarea fue Guillermo Francos, que será ministro del Interior.
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