Intendente massista echó a un enfermero del hospital municipal por ser trans

Intendente massista echó a un enfermero del hospital municipal por ser trans

Un momento difícil está atravesando un trabajador del hospital municipal de San Andrés de Giles, por el solo hecho de ser trans, de hecho, el único de la ciudad. Se trata de Federico Civerra, quien hace varios meses viene sufriendo persecuciones que derivaron en el despido de sus funciones como enfermero, con el aval del jefe comunal Carlos Puglelli y otros funcionarios.

 

El damnificado es técnico superior en enfermería y “trabajaba hace tres años en el hospital municipal de San Andrés de Giles. Estaba todo perfecto, nunca hubieron quejas de mi laburo, gracias a Dios siempre fui bien reconocido por mis pacientes, colegas y demás gente del hospital, y el 17 de septiembre de este año me citan a una reunión donde me sacaban sin algún motivo al hogar geriátrico”. 

Y añadió: “Como me negué al pase por un trauma que tuve en mi infancia en ese lugar, me dijeron que yo no me podía quedar en el hospital, sin ningún motivo, no hay legajo, no hay sumario, no hay nada que justifique ese castigo, ese pase. Me dan una licencia y me dicen que después de las elecciones yo iba a volver”. 

A partir de allí, “pasan las elecciones, mi licencia y la vuelta al hospital no se dio. Mis compañeros, médicos, enfermeras y personal administrativo juntaron firmas para que se me reintegre nuevamente al hospital y se me negó presentarlas porque me dijeron que iba a perder mi trabajo”.

Y agregó: “Me dieron una sala en el medio del campo a 35 kilómetros de mi pueblo donde había que ir por camino de tierra y los días de lluvia tener que dar una vuelta de 50 kilómetros. Como no me quedaba otra y necesitaba trabajar porque no estaba cobrando y es mi único trabajo, tuve que aceptar la propuesta y el intendente de acá y el secretario de Gobierno me dijeron que era algo momentáneo, que tenga paciencia que ya me iban a volver a traer al hospital y nunca pasó”.

En ese lapso, “tuve que poner mi auto, un Fiat 147 modelo 96 para ir y venir a ese CAPS. Ellos me habían prometido una camioneta de Salud porque a otros enfermeros le dan la camioneta. Oh casualidad, a mí no. El auto se me rompió, dos veces me quedé varado allá en el campo. Los llamé para que me lo solucionen, nunca me fueron a buscar y tuve que volverme haciendo dedo”.

Hace unos días, “el martes presente una licencia por acoso y presión laboral firmada por una psiquiatra y después me llega el despido. Me echaron bajo licencia. Vino ATTTA (Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina) a defenderme, a mediar porque claramente es una persecución por ser trans y mi presión en época de elecciones era una molestia”.

“Acá en mi pueblo tengo el apoyo de todo el pueblo, de los que eran compañeros del hospital, médicos, nadie habla mal de mi trabajo gracias a Dios. Y ayer y hoy, salieron a hablar, el secretario de Gobierno de San Andrés de Giles, Miguel Gesualdi, y el intendente, Carlos Puglelli, a decir que yo era un mal empleado y por eso me sacaron. Son pocos serios y toda la humillación que viví en estos cuatro meses es indescriptible”, finalizó Federico.

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