Al parecer, el propietario habría prolongado el contrato, mientras se sigue trabajando en obtener el edificio propio. En la ocasión también se habrían solucionado algunos problemas estructurales que tenía el edificio de calle 17 entre 18 y avenida Kelly.

Tiempo atrás, personal docente, administrativo y alumnos del Instituto habían concurrido al Honorable Concejo Deliberante para pedir la intervención de los concejales en el conflicto. Desde ese momento se empezó a manejar como alternativa algunos establecimientos educativos de la ciudad, que no llegaban a satisfacer las necesidades y exigencias de la matrícula.

Afortunadamente, por el momento el conflicto se ha solucionado, aunque continuarán trabajando para que la situación no se vuelva a repetir cuando se llegue al nuevo vencimiento del contrato.