La historia de las grandes compañías muchas veces comienza con un sueño pequeño, una idea modesta que, con esfuerzo y visión, se transforma en un imperio. Este es el caso de Jugos del Valle, una empresa que nació en el Estado de México con una propuesta sencilla: ofrecer jugo de uva natural al mercado local. Nadie imaginaba entonces que ese emprendimiento familiar llegaría a convertirse en una de las marcas más reconocidas de México y, eventualmente, parte del portafolio global de Coca Cola.

En sus primeros años, la empresa fue creciendo a un ritmo sostenido, destacándose por la calidad de sus productos y la confianza que generaba entre los consumidores. Su fundador, impulsado por la demanda creciente, supo posicionar la marca como líder en jugos, néctares y bebidas naturales. Así, Jugos del Valle se expandió no solo en el centro del país, sino también en otras regiones, diversificando sabores y líneas de productos.

Jugos del Valle, en su versión de uva.

Con el tiempo, su crecimiento llamó la atención de grandes corporaciones internacionales, y en 2007 se concretó una de las adquisiciones más relevantes del sector alimenticio en México: la compra de Jugos del Valle por parte de Coca Cola FEMSA. Desde entonces, la historia de esta compañía cambió para siempre, consolidándose como una marca clave dentro del mercado de bebidas no carbonatadas.

La historia de Jugos del Valle

Jugos del Valle fue fundada en 1947 en el Estado de México, con un objetivo claro: ofrecer jugo 100% natural, sin conservadores ni aditivos. El primer producto que elaboraron fue jugo de uva, utilizando procesos artesanales y frutas frescas. El éxito fue inmediato, y la empresa fue ganando espacio en los supermercados y tiendas de abarrotes de la zona.

Durante las décadas siguientes, la empresa diversificó su catálogo, incorporando jugos de naranja, manzana, durazno y combinaciones exóticas. También incursionó en productos como néctares, bebidas light y presentaciones individuales listas para llevar. Esta capacidad de adaptación fue clave para mantenerse vigente frente a la competencia y las nuevas tendencias de consumo.

Gracias a su innovación constante, Jugos del Valle logró convertirse en un referente en el sector de bebidas saludables en México. Su compromiso con la calidad, el uso de frutas frescas y la inversión en tecnología de producción la posicionaron como una empresa sólida, lista para dar el salto al siguiente nivel.

La venta de Jugos del Valle a Coca Cola

En 2007, Jugos del Valle fue adquirida por el Sistema Coca Cola en México, a través de Coca Cola FEMSA, la embotelladora más grande de la región. Esta compra no solo representó una expansión para Coca Cola en el mercado de bebidas no carbonatadas, sino también un reconocimiento al valor de una marca con raíces mexicanas y una trayectoria destacada.

Tras la adquisición, la empresa se integró al portafolio de productos de Coca Cola, manteniendo su identidad y ampliando su presencia en todo el país. Además, comenzó a exportarse a Estados Unidos y otros mercados latinoamericanos, impulsada por la red global de distribución de la multinacional.