En octubre de 2013, fue presentado un proyecto para construir un complejo de aguas termales en un predio de 53 hectáreas en el partido de Ramallo, que se encuentra ubicado sobre el camino de la ruta 1001, a orillas del arroyo Las Hermanas.

El lugar estará compuesto por un parque acuático, piletas termales, áreas de restaurantes, hotel, cabañas, spa, sectores de relax. Y constará de 250 lotes, con provisión de agua termal. El área de Parque Acuático y Termal tendrá una capacidad de 3.000 personas y estacionamientos para 1.200 coches. Además, tendrá juegos acuáticos, restaurantes, un hotel y cabañas.

Luego de que los permisos en organismos oficiales dilataran los tiempos previstos, finalmente el pasado 2 de abril la empresa Petarin-Vecarin, oriunda de la ciudad de Venado Tuerto, comenzó con la perforación del pozo exploratorio.

“Se está haciendo el pozo exploratorio para ver que características geológicas se van a encontrar para después tener el agua en superficie y de ahí en más seguir con los trabajos de obra. El estudio realizado con anterioridad marca que existe una roca capaz de portar el fluido termal y por la experiencia que tengo en la materia, y por otras perforaciones, uno sabe que hay agua, lo que no se sabe son las características que tiene”, informó el Doctor en Geología, Daniel Mársico, quien sigue muy de cerca la realización de las obras, en diálogo con diario El Norte.

Consultado sobre las características del pozo y los tiempos que demandará su finalización, respondió: “está previsto que tendrá unos 800 metros de profundidad, en estos momentos estamos en los 30 metros, y el tiempo que demandaría estaría entre los dos y los tres meses”.

Impacto ambiental

El Arq. Gonzalo Barile, en representación del grupo empresario de la ciudad de San Nicolás que se encuentra a cargo del proyecto, aseveró que se está respetando el medioambiente y aclaró que los primeros metros de la perforación son los que más tiempo demanda porque se toman los recaudos correspondientes para que no exista peligro de contaminación del agua.

“Lo que se extrae del pozo no tiene componentes que puedan considerarse como peligrosos y los mayores riesgos pueden producirse por alguna contingencia que pueda ocurrir como una derrame de combustible. Como se observa en lo que es la obra conviven perfectamente la flora con la fauna, por lo que no se producen alteraciones importantes en lo que es la exploración”, relató la Lic. en Salud Ambiental, Ivana Zecca, quien también está a cargo del control de la cobra.

No obstante, aclaró que una vez que esta etapa de obra esté terminada y ya se comience con la construcción y explotación del Complejo “se prevé la realización del estudio de impacto ambiental haciendo la programación de la cantidad de piletas va a tener el complejo, como se va a hacer la evacuación del efluente, que tipo de tratamiento se le realizará posteriormente, pero eso se puede saber una vez que se tengan las características del agua termal que se obtenga”. (InfoGEI) Ga