La Dirección Provincial de Obras y Servicios Sanitarios (DPOSS) informó este martes que en las últimas dos semanas se realizaron diversos análisis bacteriológicos y fisicoquímicos en Ushuaia, Río Grande y Tolhuin comprobando la potabilidad del agua en todos los casos.

El agua presenta un color oscuro, por encima de los valores medios y propios de la época de deshielo, sin embargo el organismo sostiene que el “color en el agua no genera ningún tipo de consecuencia en la salud de la población”.

La situación del agua turbia ya pasó por manos de la Justicia en reiteradas ocasiones quien ordenó estudio de potabilidad del agua. El último litigio judicial, estuvo a cargo de la jueza de Competencia Ampliada de Ushuaia, Adriana Rapossi.  “Oportunamente, la perito que trabajó para el juzgado que tramitó ese amparo judicial describió que el color es una característica de la cuenca hidrológica de Tierra del Fuego y que se presenta como un fenómeno estacional y dado principalmente por el deshielo pos-invernal”, sostuvo la el organismo.

Qué dice el informe

El informe realizado los días 12 y 15 de septiembre reconoce que el color del agua “supera el máximo permitido” y aduce a que esto “ocurre eventualmente debido a las características de las cuencas hídricas que abastecen las Plantas Potabilizadoras”.

Finalmente, señala que “en cuanto a la bacteriología no se evidencia deterioro en la calidad en ninguna de las muestras”.