Pese al alza del esparcimiento, las cuotas de los colegios, y el incesante avance de los alimentos, la inflación podría haber perforado el piso del 3%, una dinámica que se podría revertir en agosto por la suba de prepagas, expensas y GNC.
El Gobierno se frota las manos ante la aparición de las primeras señales de que la inflación habría perforado el piso del 3% en julio por primera vez en los últimos 10 meses.
El índice de precios se colocó siempre por encima del 3% entre octubre de 2020 y junio de 2021, aunque rondó esa cifra también en agosto y septiembre del año pasado y se colocó levemente por debajo.
Martín Guzmán, el ministro de Economía, le comentó este jueves a los empresarios en San Juan que se está viendo "una reducción de la inflación intermensual".
Aunque por ahora el optimismo es prematuro y hay que consolidar los registros una semana más (el Instituto Nacional de Estadística y Censos -Indec- publicará el Índice de Precios al Consumidor el próximo jueves 12), en el Gobierno entienden que "queda tácito por lo que se dice" que cuanto menos la inflación fue menor que en junio, cuando marcó 3,2% mensual.
La consultora Ecolatina midió para el Gran Buenos Aires (GBA) un IPC de 2,6%, con lo que el acumulado en los primeros siete meses del año llegaría a 28%.
"Con esta variación, tuvimos el avance más bajo desde septiembre de 2020, lo que representa una buena noticia: a pesar del arranque de año agitado, la suba de precios empezó a desacelerar en los últimos meses, ayudada por las anclas cambiarias y tarifarias", analizaron.
En Ecolatina notaron que la inflación núcleo sigue por arriba del 3% -lo que contrapesa a los precios regulados- y vieron que Alimentos y Bebidas también estuvo por debajo del 3% por primera vez en el año por un "aumento moderado de la carne vacuna (1%), y la baja estacional de las frutas".
Asimismo, los alimentos de consumo masivo "siguieron creciendo por encima del 4% mensual en promedio, consecuencia del desarme de Precios Máximos".
El Índice de Precios de Supermercados que elabora el Centro de Estudios Económicos y Sociales (CESO) Scalabrini Ortiz registró en los últimos días de julio y los primeros de agosto una inflación de 2,5% mensual, con Bebidas, Limpieza, Alimentos Frescos y Perfumería que picaron en punta.
Pero a contramano de estas estimaciones, C&T Asesores Económicos calculó en 3,1% el avance de los precios el mes pasado, con esparcimiento (vacaciones de invierno) y educación (las cuotas de los colegios) "muy por encima del promedio", alimentos y bebidas en 2% y Salud en 1,9%, antes de un nuevo incremento en las prepagas.
A su vez, la consultora LCG señaló que los precios de los alimentos habrían trepado un 3,3% en julio.
En tanto, Eco Go estimó en 3% la inflación del mes anterior; con lo que ese piso no se habría perforado.
Para agosto, las subas de las prepagas (9%), los alquileres, las expensas y el Gas Natural Comprimido -GNC- podrían revertir la dinámica de la desaceleración, que se observa a partir del pico de marzo.
Con todo, hace rato quedó en evidencia que la meta inflacionaria del 29% anual será superada por al menos 10 puntos porcentuales y cerrará 2021 más cerca del 45% a 50%, como pronosticaron los bancos, economistas y consultoras desde el inicio del año, previsión que mantienen aún hoy.
En agosto se cruzará finalmente la barrera del 29% y con el informe del Indec de la próxima semana, la inflación volverá a estar por encima del 50% interanual, con el dato más alto desde enero de 2020.
Al analizar los números de junio, el Gobierno destacó que la Argentina sufre un shock por el alza de los productos primarios (soja, maíz, trigo y girasol), que impacta sobre los precios de los alimentos a nivel local -aunque, por otro lado, mejora las cuentas públicas externas-.
Y se comparó con Estados Unidos, Brasil y México, países que también viven un período de inflación por encima de las expectativas y los deseos de sus administraciones.
Por eso, apuesta todo a las anclas cambiarias y tarifarias para frenar a los precios y la reapertura de las paritarias para recuperar los salarios reales, aunque en 2022 se puedan sentir los efectos secundarios.
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