Por Julieta Romero

Sin piso, la actividad industrial presentó durante mayo una caída del 0,2% mensual y una baja del 15,2% interanual en los primeros cinco meses del año. Ante una actividad que no despega, el Gobierno proyectó en el Presupuesto 2025 una caída de la producción fabril del 9,8% en 2024, lo que, de verificarse, implicará el peor resultado de la serie, incluso por debajo del 2020 pandémico. El repunte de la Economía será clave para lograr el superávit fiscal: en junio, que apunta a ser el primer mes con déficit, los impuestos vinculados a la actividad cayeron un 7,6% interanual.

La consultora LCG señaló que "la recuperación es todavía marginal y resta ser confirmada". Y analizó: "En la industria, un tipo de cambio que sostiene una dinámica de atraso, sumado a salarios que perdieron sensiblemente contra la inflación y no traccionan el consumo, hacen pensar que la recuperación será lenta, sobre todo cuando todavía quedan pendientes ajustes de precios que incidirán directamente sobre la estructura de costos".

 

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LCG calculó que habrá en total un desplome de la actividad fabril del 12% en 2024, mientras que el Gobierno fue un poco más optimista, aunque con números que de todas formas, de corroborarse, dejarán al sector en el fondo del pozo. El Ministerio de Economía proyectó en el Adelanto del Presupuesto 2025 que la industria caerá en 2024 un 9,8%. Si estos números se cumplen, será el peor resultado anual desde que arrancó la serie, en 2016, superando incluso el declive del 7,5% que sufrió el sector producto de la pandemia en 2020. 

Para la consultora Vectorial, las bajas en la industria manufacturera y el comercio "prolongan el estancamiento de la economía", lo que tiene consecuencias directas en la recaudación tributaria. Y es que, en cuanto a los deteriorados ingresos del fisco, "las mayores caídas en términos reales se presentan en aquellos impuestos ligados a la actividad económica".

De hecho, según los resultados devengados de la Oficina de Presupuesto del Congreso, junio fue el primer mes de la presidencia de Javier Milei en tener déficit fiscal, ligado a una caída real en la recaudación del 13,9%. Acorde a la consultora Invecq, "los impuestos estrechamente vinculados a la actividad económica, IVA DGI, Créditos y Débitos bancarios, y las Contribuciones Patronales, cayeron 7,6% interanual". Un repunte en la actividad será clave para apuntalar las cuentas públicas, en un semestre que apunta a ser complicado.

Invecq analizó que la economía "parecería no salir del valle" y "ya descartada la recuperación en V, comienza a tambalear la salida en U". Además, remarcó que las variaciones en el tipo de cambio podrán tener un impacto sobre la actividad, en el marco de atraso del dólar oficial frente a la inflación y la pretención del Ministerio de Economía de mantener el crawling peg del 2%.

"La exacerbación de la volatilidad, evidenciada desde mediados de mayo, pero profundizada en las últimas semanas, pone mayor presión sobre la estrategia cambiaria actual. Pese a la insistencia del gobierno en no hacer grandes modificaciones (en particular, mantener el blend y el crawling-peg del 2%), una recalibración luce cada vez más inevitable; recalibración que podría derivar en una aceleración transitoria de la inflación, con impacto en el consumo y en la actividad", señaló Inecq.