El año comercial está llegando a su fin y, mientras se preparan los operativos para el verano, las automotrices comenzaron a hacer sus previsiones para lo que viene.

Luego de un 2014 en el que nadie espera superar las 680.000 unidades descartando una caída de alrededor de 30% respecto del año anterior –se habían patentado 950.000 unidades–, los ejecutivos de las marcas que comercializan unidades 0 km en el país ya hablan de una profundización de la caída para 2015.

"El 2015 va a ser muy particular, hay elecciones presidenciales y la mayoría lo percibe como que se llegó a un fin de ciclo. A esto se le suma la deuda con las casa matrices y la caída del mercado brasileño", explica en off the record un hombre fuerte de la industria automotriz.

Además del clima electoral el problema real es que, de alguna manera, las terminales quedaron presas de su propio reclamo. Durante la primera mitad del año le reclamaban al Ministerio de Economía que apruebe las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación (Djai) algo que, finalmente, el Gobierno hizo. Sin embargo, la "trampa" fue que no les habilitó dólares para pagar las importaciones por lo que comenzaron a generar deuda con sus casas matrices. Hoy, las empresas acumulan una deuda que ronda los u$s 5.000 millones.

A pesar que desde hace un mes el sector recibe u$s 100 millones por mes para operar, Isela Costantini, presidente de General Motors Argentina, Uruguay y Paraguay, afirmó que el sector "necesita dólares".

Si se le suma la caída del mercado interno y de las exportaciones a Brasil, se generó un contexto en el que nadie quiere deber más dólares para traer autos a una plaza que seguirá cayendo.

Tanto es así que las estimaciones negativas ya llegaron a las autopartista. Según explicó a El Cronista un fabricante de piezas, desde las terminales le explicaron que "con los dólares que nos dan y la cotización a 

$ 8.50 podemos fabricar de 500.000 a 550.000 autos, porque el resto lo tendríamos que importar con contado con liquidación o seguir generando deuda con las casa matrices".

Pablo Sánchez Liste, Director de Comunicación de Peugeot Argentina, aseguró a CarsMagazine.com.ar que la marca piensa en 2015 previendo que el mercado "seguirá en una tendencia a la baja, en porcentajes que todavía no tenemos definidos o identificados".

Con estos números, y en opción más optimista que habla de 680.000 unidades para este año y 550.000 para el que viene, la caída sería de 19,11 por ciento

Respecto a esto, fuentes del sector que se mostraron más optimistas y señalan la posibilidad de igualar el 2014 de la mano de un crecimiento de Brasil, que no tendrá el ruido electoral ni del Mundial de Fútbol. 

Sin embargo, y a pesar del optimismo que genera inversiones como la de Toyota –u$s 800 millones– y la llegada de nuevos modelos, los empresarios reconocen que habrá una caída en la importación porque "nadie pagará contado con liquidación porque ese costo financiero no se puede trasladar a precio" y descartan que las marcas incrementen su exposición con las casas matrices.

A pesar de esto, como la industria automotriz planifica a "largo plazo", muchas de las marcas ya hablan de que durante 2016 llegaría el rebote y el sector retomará la senda ascendente