Probablemente ni dentro del mismo seno K se sepa con certeza qué sucederá. Pero las cartas y esquemas están más o menos planteados. Pablo Bruera, a pesar de la negativa de su hermano Mariano, analiza no presentarse para evitar de lleno una derrota.

Por otra parte, el ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Julio César Alak, comenzó a sonar como posible aspirante a intendente, en una alianza con Florencia Saintout, quien podría terminar encabezando la nómina de senadores provinciales. Sería la "Gran 'Coqui' Capitanich", y llevaría como aspirante a gobernador bonaerense a Aníbal Fernández.

Un escenario similar, pero reemplazando al “Turco”, analiza el viceministro Carlos Castagneto de la mano de su candidata a intendenta, Ana Castagneto.

Hasta tanto, dentro del escenario Bruera intendente 2015, puertas adentro del municipio se discute quiénes serán los elegidos para integrar el plantel de soldados de cara al periodo 2016-2019. Quiénes renuevan, quiénes esperan y quiénes surgen con fuerza en la escena política local.

PRIMER CONCEJAL, UNA PIEZA CLAVE

Hay un rumor que circula fuerte en el mundillo: de renovar el cargo, Pablo Bruera dejaría la municipalidad en dos años para trasladarse a un ministerio o a algún otro estamento nacional. Si esta premisa se cumple, el primer concejal de la boleta 2015 pasaría automáticamente a ocupar la intendencia.

Un nombre que se baraja para encabezar la lista de precandidatos a la concejalía es el del massista encubierto Pedro Borgini, titular de ATSA La Plata, integrante de la CGT local y actual presidente del Concejo Deliberante. Este tapado referente de Sergio Massa no es del riñón propio de Pablo Bruera, pero es un aliado fuerte, que apareció en escena para salvarle las papas en el momento más difícil de su gestión. Se ha ganado el respeto del jefe comunal y es, quizás, el único dirigente al que trata como par. Cabe recordar que el sindicalista compartió micrófono con Bruera en el acto en conmemoración del 17 de octubre de 1945 que se llevó a cabo el año pasado en el camping de UPCN. Ese día, pareció no ser casualidad que Borgini estuviera a la altura del intendente.

Otra personalidad que estaría buscando encabezar la lista es la fracasada randazzista Valeria Amendolara, actual diputada provincial que simuló un alejamiento de sus jefes políticos durante el año pasado y ahora regresó a encolumnarse bajo su ala. Amendolara fue elegantemente apartada del sector de Florencio Randazzo, tras un llamado telefónico realizado al ministro de Interior y Transporte el día anterior al lanzamiento de la policía local, donde Bruera hizo público su apoyo al presidenciable Daniel Scioli. “Mañana Pablo va a decir que apoya a Daniel, pero va a ser una cuestión política, nosotros vamos a jugar con vos”, habría sido la mentira de Amendolara que terminó de arruinar esta breve relación.

Lo cierto es que a raíz de su fracasado intento de infiltrarse en el randazzismo, y de su prácticamente nulo armado, difícilmente logre retornar al Concejo Deliberante en primer lugar.

RIESGO, LUGLI Y RODRÍGUEZ

Borgini no es el único concejal al que se le termina el mandato. Fabián Lugli, esposo de la secretaria de Gobierno Susana Gordillo y actual titular del bloque FpV, concluye su periodo este año, y probablemente esté buscando renovar su banca, excepto que le ofrezcan algo más jugoso.

Algo similar ocurre con Lorena Riesgo, titular de la comisión de Hacienda en el Concejo y alfil del ex Quebracho, Santiago Martorelli. Riesgo podría renovar su mandato ocupando el tercer lugar, destinado al cupo femenino. Ahora bien, siendo que Borgini también es cercano al jefe de Gabinete, difícilmente Lorena podría ocupar el tercer lugar si el sindicalista llegara a quedarse con el primero. Martorelli, si no, sería dos veces premiado.

Quien sí podría llegar a ocupar el cupo femenino es Sabrina Rodríguez, quien eventualmente sostiene su alianza con el bruerismo, aunque ha dado varias idas y vueltas desde su llegada al Concejo.

FUNCIONARIOS EN ASCENSO

Aunque las caras del Concejo Deliberante sean, quizás, las más visibles, hay otros funcionarios municipales que ascienden en importancia por prepotencia de trabajo.

Suena para ocupar un lugar en las listas Mariano Suárez, el titular del Mercado Central que cobró relevancia no sólo con la efectiva implementación de esta política sino también, y fundamentalmente, con las pintadas callejeras “Es tiempo de Mariano” a las que se les añadió el apellido Suárez. Cercano a Mariano Bruera, Suárez podría ser una posibilidad.

Otro nombre que pisa fuerte en el terreno bruerista es el de Mauricio Castro, subsecretario de Entidades y Colectividades que apoyado en el voto extranjero supo construir una pata poderosa de la gestión local. Castro proviene del riñón duro del poder municipal y cuenta con el valor agregado de su juventud. Actualmente, es también concejal suplente por la lista 2011.

Un funcionario que podría volver al Concejo es Gustavo Luzardo, el ex combatiente de Malvinas que ahora maneja Control Urbano. Luzardo bajó el perfil que había comenzado a levantar ni bien asumió la secretaría; quizás prefiera quedarse ahí.

Por último, el hombre que se maneja en las sombras pero que es también del riñón duro y original del bruerismo es Gabriel Céspedes. Si bien ocupó un mandato como concejal, Céspedes siempre mantuvo el perfil bajo. A fines de 2013 dejó su recientemente renovada banca para dejarle el lugar a Germán Beltrano. Titular de Espacios Públicos, Céspedes podría retornar a su banca o negociar un mejor puesto en la gestión municipal.