Durante los últimos dos días, los Bomberos de nuestra ciudad combatieron más de 15 incendios, debido a la intensa sequía por falta de lluvias, altas temperaturas y la falta de prevención de la gente.

Todo esto hizo propicia que las condiciones sean las suficientes para que cualquier mínima chispa o fuente de calor desate incendios de pastizales, montes y fachinales, los que se inician y avanzan con gran rapidez, incluso cerca de la zona urbana. 

Desde el Cuartel de Bomberos de Junín, su jefe, el comisario Javier Di Pierro, insiste con la prevención y asegura que la mayoría de estos incendios se pueden evitar simplemente no quemando y logrando una consciencia social que "vea como equivocado" a quien lo hace.

Si bien los factores nombrados son claves para el desarrollo de estos incendios, desde el Cuartel de Bomberos aseguran que la gran mayoría se pueden prevenir y evitar, sobre todo aquellos que devienen de quemas que se salen de control por subestimación de quienes las originan.  

La lucha contra el fuego de pastizales demanda mucho trabajo del personal de Bomberos, utilización de recursos y riesgos ya que, si bien se cuenta con medios suficientes, al usarse en estos incendios dejan de estar disponibles para otras posibles intervenciones que pudiesen poner en riesgo la vida de las personas.

Desde Bomberos señalaron que, para todos los casos lo más importante es la prevención, cuestión en la que se viene trabajando arduamente durante los últimos años mediante campañas al efecto. Especies animales amenazadas, nidos destruidos, hábitats devastados, humo que molesta a vecinos y al tránsito, desgate de los recursos naturales, riesgos en el traslado de las unidades de emergencia, peligro para los combatientes forestales, pánico y nerviosismo de quienes viven en las cercanías son alguna de la contras que se observan al momento de efectuar una quema y que esta se salga de control. Asimismo, se observa que esta práctica de realizar quemas controladas, ya sea ramas o pastizales, sigue siendo habitual en nuestra ciudad y lamentablemente no dan tregua.