En diálogo con la hermana de Ramona Avellaneda, propietaria de la casa, está mencionó que pasadas las 16 horas vecinos alertaron sobre el incendio que se había originado en la casa a raíz, aparentemente, de un corto circuito. Rápidamente se llamo a la policía y a los bomberos, quienes en pocos minutos arribaron al lugar logrando sofocar las llamas. Asimismo, un ambulancia del SAME asistió a Ángela Rodríguez y Adriana González quienes sufrieron principio de asfixia porque ingresaron a la casa tratando de recuperar las pocas pertenecías de la familia. Pese a esto camas y ropa de los 7 hijos y nietos de Avellaneda quedaron reducidos a cenizas a causa del voraz incendio.