Ante “la necesidad imperiosa de revertir la tendencia del consumo de recursos derivados de los hidrocarburos para generar energía eléctrica que ha tenido nuestro país en los últimos 50 años”, una iniciativa presentada esta semana por el diputado Martín Anguiano (Cambiemos) impulsa la sanción de una ley provincial para el fomento de las fuentes renovables de energía eléctrica.

En la fundamentación del proyecto se advierte que la producción y consumo de energía basada en hidrocarburos “ha tenido un efecto negativo sobre la economía del país, debido a que Argentina ha perdido el autoabastecimiento energético (producción de petróleo y gas) y esto ha llevado a impulsar la necesidad de importar gas y petróleo, lo que ha impactado directamente sobre la balanza comercial y el stock de reservas del Banco Central de la República Argentina”, dado que las importaciones se pagan con divisas.

Para cumplir los objetivos planteados en la norma, en el articulado se establecen las condiciones “administrativas, técnicas y económicas” para su aplicación.

A modo se definición se afirma que “la generación de energías renovables es la que se produce en el interior de la red de un punto de suministro o instalación de titularidad de un usuario y que estuviera destinada al consumo propio”.

Beneficiarios

El texto de la norma establece como sus beneficiarios a “aquellos usuarios (consumidores) de energía eléctrica de la provincia que demanden de las distribuidoras consumos inferiores a 300 kilovatios y  que instalen en su red de consumo un equipamiento de generación eléctrica de origen renovable, conforme las especificaciones que reglamente la autoridad de aplicación correspondiente y que se conecten a las redes de la distribuidora de energía eléctrica”. La autoridad de aplicación será el Ente Provincial de Regulación Energía de Entre Ríos (Epre).

Venta de excedentes

El proyecto promovido por Anguiano prevé que los usuarios podrán “inyectar la energía eléctrica que generen a través de medios renovables (y no hayan utilizado para su consumo)  a la red de distribución pública, utilizando las respectivas interconexiones las cuales deberán estar sujetas a las condiciones técnicas establecidas”.

Los usuarios que deseen establecer una conexión con la modalidad de generación distribuida de energías renovables integradas a la red eléctrica pública, deberán solicitar autorización a la empresa o cooperativa que tenga la concesión de la distribución de la energía eléctrica en la jurisdicción correspondiente y suscribir un contrato.

“En el caso que además del uso particular de la energía generada por el usuario, este pretenda vender energía a la empresa o cooperativa distribuidora para volcarla a la red pública, deberá firmarse un contrato de compra de energía con la empresa o cooperativa  distribuidora, previo análisis y autorización del proyecto por parte de la autoridad de aplicación”.

El precio de la energía que el usuario vuelque a la red será establecido por el Epre y deberá ser acorde al precio que se abone en el mercado eléctrico nacional.

Incentivo

Con el objeto de incentivar la generación distribuida de energía renovable, es decir energía por encima de lo consumido para ser derivada a otros usuarios- durante los primeros cinco años “el usuario percibirá (por parte de la empresa o cooperativa distribuidora) por la energía que vuelque a la red, además del precio establecido en el artículo 8, un incentivo del  15 por ciento del precio base por kilovatio generado y volcado a la red” 

Energías renovables

A los efectos de la norma aludida, se consideran energías renovables, las derivadas de las siguientes fuentes: eólica, solar, térmica, solar  fotovoltaica, geotérmica, mareomotriz, undimotriz, de las corrientes marinas, hidráulica, biomasa, gases de vertedero, gases de plantas de depuración, biogás y biocombustibles.