El vicegobernador y candidato oficialista, Marcos Koopmann, confirmó ayer que presentará un proyecto para que Neuquén excluya de la base imponible del Impuesto a las Ganancias el ítem de zona desfavorable de los sueldos estatales.

Se trata de una iniciativa de larga data de los sindicatos que había sido resistida por el propio MPN y que generó una virulenta protesta cuando Ana Pechen presidía la Legislatura, pero que ahora justificaron porque «se llegó a un extremo».

«Nunca llegamos a esta situación con tantos trabajadores pagando y en las categorías más altas», dijo ayer Koopmann a este diario.

Aseguró que el impuesto «hoy está siendo totalmente confiscatorio y abusivo» y anticipó que la modificación podría ingresar como un artículo anexo del presupuesto 2023 que se empieza a tratar hoy. Buscará que quede aprobado antes de fin de año, para que ya pueda ser aplicable a los sueldos de diciembre, que llegarán con el medio aguinaldo y, en consecuencia, mayores descuentos.

Según detalló el funcionario, el cambio no será bajo la forma de una eximición ni una compensación, sino que la provincia tomaría una nueva base imponible, a la manera que ya lo hicieron con algunos adicionales La Pampa, a través de un decreto de 2017, y Santa Cruz, en 1997.

Si bien es una iniciativa reñida con el orden jurídico, dado que el Impuesto a las Ganancias es ley nacional y su recaudación está a cargo de la AFIP, Koopmann aseguró que están trabajando con tributaristas para responder eventuales impugnaciones.

«Yo voy a responder que hoy el impuesto es inigualitario e inequitativo», sostuvo.

Un debate trunco que terminó en apagón

Cuando ingrese el proyecto del vicegobernador no va a ser la primera vez que a la Legislatura le toque debatir la exclusión de la zona desfavorable del Impuesto a las Ganancias para los estatales de Neuquén.

En el 2015 hubo prolongados reclamos de los sindicatos para que los diputados accedan a resolverlo a través de una ley, pero nunca llegó a aprobarse por la negativa del MPN a sancionarla.

En junio de 2015, una protesta de ANEL, el gremio de los empleados legislativos, intentó boicotear una sesión especial en la que debía aprobarse una emisión de bonos. La vicegobernadora en ese momento era Ana Pechen, actual compañera de fórmula de Marcos Koopmann.

Los trabajadores cortaron la luz, lanzaron bollos de papel en el recinto y decretaron un paro que obligó a sesionar sin equipo de sonido y bajo la presencia de un escribano que acreditara la legalidad de la sesión frente a la ausencia de taquígrafos.

El argumento del MPN en ese momento era que la Legislatura no tenía resortes para cambiar una ley nacional. Un proyecto parecido al que presentará Koopmann ahora solo pudo obtener un despacho de la comisión de Trabajo, que presidía el petrolero Daniel Andersch, del sector Azul y Blanco del partido.

Cuando la iniciativa llegó a la de Asuntos Constitucionales, quedó rechazada por el voto negativo del MPN. El vocero del oficialismo fue Claudio Domínguez. Dijo que la Legislatura provincial no podía legislar sobre una norma nacional y advirtió que «tampoco habría igualdad ante la ley» de los trabajadores públicos y privados.

Sostuvo entonces que se generarían «castas de privilegio en la sociedad neuquina».