Ingka Investment, la división de inversiones del Grupo Ingka, que es el mayor gestor de tiendas de Ikea, pretende invertir 1.000 millones de euros en empresas que están trabajando por aumentar la infraestructura de reciclaje. El objetivo de la compañía es impulsar el reciclaje de más productos al final de su vida útil y convertirlos en materias primas secundarias.

Las inversiones pondrán foco especial en las empresas centradas en el reciclaje textil

La intención de Ingka es gestionar mejor los residuos que se generan cuando los muebles, la ropa de cama o los colchones de Ikea se desechan y terminan incinerados o en vertederos; pero su ambición también es impulsar el reciclaje en el mercado en general. Dos tercios de los fondos se destinarán a nuevas inversiones en empresas de reciclaje, con un enfoque particular en los textiles, mientras que el resto se destinarán a compañías en las que Ingka ya ha invertido. 

Con este compromiso, el grupo pretende avanzar en su estrategia de sostenibilidad y reforzar su programa Circular Investments, puesto en marcha en 2017 para invertir en compañías que contribuyan a la transformación hacia una economía circular. Apuntan que a través de esta iniciativa las empresas de su cartera han reciclado alrededor de 2,7 millones de toneladas de materiales en total, evitando más de 9,4 millones de toneladas de dióxido de carbono. 

Según exponen, la economía mundial consume cada año un 75% más de recursos naturales de los que la Tierra puede regenerar, lo que genera enormes cantidades de residuos, pero menos del 20% de ellos se recicla. La intención de Ingka es contribuir a mejorar esas cifra invirtiendo en firmas centradas en desarrollar tecnología, en prevenir el desperdicio o en suministrar materiales reciclados. 

Junto con el anuncio de su inversión, Ingka ha compartido algunos casos de éxito de su programa. Destaca, por ejemplo, la labora de RetourMatras, que recicla colchones y produce repoliol, una alternativa para sustituir los materiales de origen fósil en nuevos productos de espuma, que utilizan varios clientes, entre ellos Ikea. Cita también Morssinkhof Rymoplast, que recicla plásticos posconsumo y produce plásticos reciclados, señalan que la inversión de Ingka ha permitido duplicar su capacidad de reciclaje hasta las 515.000 toneladas de plástico al año. 

“Nuestra ambición de invertir 1.000 millones de euros en el crecimiento de la infraestructura de reciclaje es crucial para que la estrategia de sostenibilidad más amplia del Grupo Ingka vaya más allá de nuestras propias operaciones"; ha comentado Peter van der Poel, Director General de Ingka Investments, en un comunicado. “A través de las inversiones, nos comprometemos a hacer nuestra parte para garantizar que los materiales valiosos se reciclen y reutilicen en la producción de nuevos productos”. 

No obstante, la compañía ha aprovechado la ocasión para reclamar una legislación más estricta. Considera que la regulación ha de priorizar más el reciclaje frente a la incineración y el vertido, por ejemplo, garantizando que los planes de responsabilidad ampliada del productor derivaran en mayores tasas de reciclaje. 

Señala también que acoge favorablemente las normativas de diseño ecológico orientadas a fomentar la demanda de materiales reciclados. 

“La ambición de Ingka en materia de inversiones circulares es solo un pilar de cómo mantenemos las cosas buenas en marcha: manteniendo los productos y materiales en circulación al mayor valor posible durante el mayor tiempo posible”, explican desde la compañía. “Cuanto más reutilicemos, reparemos o reciclemos nuestros productos y materiales y reduzcamos el uso de materiales vírgenes, más ayudaremos a combatir el cambio climático y a proteger la naturaleza para las generaciones futuras”.