Los trabajadores y estudiantes puntanos que comunmente suelen movilizarse en colectivo tendrán un cierre de semana para el olvido. Hoy los choferes de Transpuntano harán una huelga que dejará sin servicio a los usuarios por 24 horas. La medida de fuerza comenzaría a aplicarse en el primer servicio del día, a las 5:15.

Así lo confirmó el secretario general de la Unión de Tranviarios Automotor (UTA), Alberto Ayala, después de una asamblea que realizaron junto a los afiliados al gremio. Dijo que la decisión de parar es en reclamo de mejoras laborales, de diferencias salariales y para exigir la reincorporación a la empresa de dos compañeros.

"Tenemos problemas con los horarios, falta de descanso entre las distintas vueltas, los baños que supuestamente hubo una inspección y ya estarían en condiciones, mientras que también nos deben una diferencia de liquidación de los haberes de la licencia del 2012, por los que la empresa les debe a todos los trabajadores unos 160 mil pesos", explicó Ayala ayer a El Diario de la República minutos después de las 20.

Además, diez minutos más tarde, este matutino contactó telefónicamente al presidente de Transpuntano, Mariano Estrada, quien señaló que si bien la firma cumplió con la presentación de un servicio de emergencia en el Programa de Relaciones Laborales, desconfió de que la UTA permita la salida de los coches desde la base central que está ubicada sobre la ruta 3.

"Como siempre pasa en estos casos, dependemos de `la buena voluntad´ del gremio. El diagrama prevé dos unidades por línea y vamos a tomar todas las precauciones para que se cumpla y si no posibilitan que los colectivos salgan, labraremos las actas pertinentes con un escribano para quedar al resguardo de posibles sanciones",  indicó Estrada, quien aseguró que hay grandes posibilidades de que la medida de fuerza sea declarada ilegal.

Un dato curioso, es que Relaciones Laborales había convocado a las partes para el mediodía a una nueva audiencia, es decir, en coincidencia con el día que los choferes habían anunciado parar.