Inés García integra una lista política por primera vez. Ha sido parte de instituciones y de actividades comunitarias, pero no candidata política. Por cuestiones familiares tiene buenos vínculos con el radicalismo, incluso en su momento llegó a concurrir a un par de reuniones de esa franja política, pero nunca militó para el centenario partido.
"En realidad Guillermo hacía rato que venía tratando de sentarse a hablar conmigo. Yo al principio era renuente, le llevó su buen trabajo convencerme. Finalmente el viernes nos sentamos a charlar, me dio a conocer la gente que estaba involucrada y cuál era la idea general. Y lo que me sedujo fue eso: ver la gente que iba en la lista, que es gente común, de trabajo, buena gente, personas con inquietudes y valores similares a los míos. Entonces me sentí identificada, y pensé que si tantas veces he estado involucrada en distintas instituciones y espacios comunitarios, era hora de hacerlo desde un lugar en el que uno realmente puede trabajar con otras herramientas", resumió Inés a este diario.
Concretamente, "me parece pertinente moverme del lugar de estar quejándome todo el tiempo, que es lo que muchas veces uno hace, y ponerme en marcha para intentar desde el lugar que sea, aunque sea chiquito, cambiar aquellas cosas que yo crea que hay que modificar en favor de mi pueblo".
La candidata, conocida públicamente en nuestra ciudad por su trabajo como locutora y conductora radial, puso de relieve que los aspirantes que representan al Pro y a Sergio Massa en Bolívar (otras dos listas locales también son traccionadas por el intendente de Tigre, que va como candidato a diputado nacional) no piensan necesariamente igual respecto de todos los temas. "Creo que eso es lo que hace atractiva a esta lista. Hay un margen muy importante de libertad para poder hablar, proponer, marcar algo con lo que uno no está de acuerdo. Eso es lo que más me atrajo", subrayó. Más adelante, y en la misma bisectriz de pensamiento, aseveró que "trabajamos desde un lugar de mucha igualdad. Acá nadie se subirá a un pedestal a impartir clases de nada".
¿Cuáles son esas cosas que te gustaría cambiar, que te motivan a correrte del cómodo lugar de la queja?
-Lógico que hay un montón de proyectos por desarrollar. Hay temas que nos inquietan: la seguridad es un tema que a los bolivarenses les está haciendo mucho ruido. La integración de muchísimos sectores. La salud. Obviamente nos tenemos que sentar a hablar y a desarrollar proyectos. Por eso también nos parece fundamental charlar con la gente, conocer su inquietud y sus necesidades, dado que en definitiva nosotros vamos a ser un canal para que la gente sea escuchada, atendida y le sean solucionadas sus problemáticas.
Hay temas de siempre, como la salud, la educación, la seguridad. Pero si logramos ir solucionando cosas irán surgiendo nuevos ítems dentro de las mismas temáticas, y ahí radica justamente nuestro desafío.
"LOS BOCA-RIVER ME TIENEN UN POCO PODRIDA"
"Es importante que comencemos a valorar el trabajo del otro, a reconocer lo bueno de su trabajo y a remarcar lo malo, pero remarcarlo para cambiarlo, no para quedarnos en la queja y en señalarle el error con dedo admonitorio", expresó Inés en otro párrafo de la entrevista. "Personalmente, los Boca-River me tienen un poco podrida. No quiero más enfrentamientos, no es el país que yo quiero para mis hijos, si bien respeto a las personas que piensan distinto sobre esto. Este grupo del Pro básicamente está basado en respetar las ideas de los demás, sean parecidas o no tanto a las nuestras, y por eso tenemos una gran diversidad de pensamientos".
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