Conflicto en el kirchnerismo duro.
El quiebre entre Martín Sabbatella y Carlos Heller incluyó una disputa judicial por el sello Nuevo Encuentro y tendrá repercusión en el Congreso nacional y en la Legislatura porteña. Luego del enfrentamiento en las primarias para la jefatura de gobierno, en las que el titular del AFSCA impulsó a Gabriela Cerruti y el banquero (de Partido Solidario) fue otro de los siete competidores del Frente para la Victoria, en plena discusión por el armado de listas formalizaron la ruptura.
La jueza María Servini de Cubría desestimó una presentación para que Sabbatella dejara de usar el sello Nuevo Encuentro, uno de los anotados el miércoles en el Frente para la Victoria. “Se fue el PC, Octubres, Solidaridad e Igualdad, el Partido Solidario... En ese supuesto frente quedó solo Sabbatella”, lanzaron los que dieron el portazo. La impugnación apuntaba a la prohibición del uso del nombre y su simbología. “Nuevo Encuentro es el partido de Martín. Ya nos presentamos así en las elecciones de 2009, antes de que lo integrara Partido Solidario. Es como si a Scioli le prohibieran usar el color naranja”, fue la réplica del sabbatellismo.
En la Cámara de Diputados, los tres integrantes de Nuevo Encuentro dejarán de llamarse de ese modo y conformarán un bloque con otro nombre, posiblemente Solidario + SI. Sería así una fusión de los partidos de Heller (del que también forma parte el diputado Juan Carlos Junio) y de Carlos Raimundi (Solidaridad e Igualdad), también distanciado de Sabbatella, en su caso desde año pasado. El bloque ya había sufrido la partida de Gastón Harispe, al Frente para la Victoria. “A Sabbatella no le quedó ninguno de los cuatro diputados que tenía, lo que refleja su incapacidad de conducir y de contener dirigentes que no son de su propio partido”, cuestionaron al titular del AFSCA una vez consumada la ruptura. Entre las facturas que le pasaron, le reprocharon no haber respetado el “acuerdo implícito” de reconocer a Heller como referente en la Ciudad, al impulsar a Cerruti, y de priorizar en el reparto de cargos y de lugares en las listas a los dirigentes de su partido, desde lo formal Encuentro para la Democracia y la Equidad.
“La diferencia es política. Como dice Martín, ahora nos conduce la Presidenta y después de diciembre nos conducirá Cristina. Ellos tienen su autonomía y nosotros somos kirchneristas puros”, dijeron los sabbatellistas. En la Legislatura porteña, Edgardo Form -que responde a Heller- anunció que dejará la bancada de Nuevo Encuentro para formar el monobloque de Partido Solidario.
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