Un repaso de algunas miradas en comparación con las legislativas del año 2011 permite descubrir que el cambio de escenario en el mapa político provincial, si lo hay, no es tan rotundo, al menos en cuanto a las previsiones que se puedan hacer para las generales.
Independientemente del modo en que cada agrupación mayoritaria resolvió su interna -en esos casos sí hay modificaciones profundas, que ya fueron interpretadas-, a la puja general, que en realidad se dará en octubre, se llegará en condiciones no muy distintas a las de dos años atrás.
Para empezar, los candidatos del PJ fueron en conjunto los más votados: casi el 50% de los electores se inclinaron por un referente peronista ratificando la hegemonía partidaria en la provincia.
El crecimiento del Frente Pampeano, respecto de la elección primaria de 2011, no fue tan impresionante como algunos describieron ante la primera mirada, aunque sí fue clara la irrupción -sobre todo en Santa Rosa- de un candidato individual como Francisco Torroba, que aquella vez no participó directamente pero sí apadrinó al perdedor Ricardo Consiglio.
Entre Carlos Javier Mac Allister, Adriana García y Darío Hernández sumaron un porcentaje de votos similar al que en 2011 cosechó el mismo sector de derecha y furiosa oposición al kirchnerismo, aquella vez con las candidaturas de Rodolfo Landucci y David Matzkin.
La participación del electorado no fue tan reducida como podía sospecharse en las primeras horas del comicio, cuando se habían dado pocas presencias y la lluvia en algunos puntos de la provincia dificultó la asistencia. Sin embargo, el porcentaje de participación fue del 78%, una cifra normal, aunque inferior a la de 2011. Es lógico: aquella vez se votó para todas las categorías, incluyendo cargos ejecutivos locales, provinciales y nacionales.
Los K y los anti-K
- En 2011, la candidata oficialista María Luz Alonso cosechó en las PASO 79.370 votos, es decir el 46,59%. En aquella ocasión, pudo existir una fuga de votos peronistas hacia otras fuerzas, a partir de las condiciones en que se resolvió la postulación, con el Humanismo metido en el medio. Ahora, los candidatos del PJ en su conjunto llegaron a 98.020 votos (49,98%).
- En 2011, el voto a Alonso fue claramente kirchnerista. Esta vez, en el PJ la “lista oficial” se llevó 42.873 votos. La única candidata que se presentó como opositora al Gobierno Nacional fue García (3,14%); los demás hicieron equilibrio, incluyendo a Espartaco Marín-Alicia Campo, que probablemente hayan obtenido tanto votos K como votos no tan K, provenientes del sector vernista. Pero si dentro del PJ se suman las listas que no usaron un discurso furiosamente anti-K, se llega a 94.939 votos.
El FrePam
- En las elecciones legislativas de 2011, los votos a candidatos del Frente Pampeano habían sido 50.062, equivalentes al 29,39% del total. Esta vez, de acuerdo a los últimos datos oficiales, fueron 62.399 (el 31,82%). Es decir que el crecimiento no fue tan mayúsculo como algunos intentaron interpretar: dos puntos porcentuales.
- Esta elección midió, como nunca antes, los votos que tienen el socialismo de Adrián Peppino y el Partido del Frente de Claudia Giorgis, que comandan los partidos minoritarios que integran el FrePam. La jugada les salió mal: la lista quedó anteúltima. El propio Francisco Torroba reconoció públicamente que otros sectores del Socialismo y del FreGen acompañaron su postulación.
- Una curiosidad: la lista de Peppino-Giorgis tiene, a esta altura de los resultados oficiales que se conocen, exactamente los mismos votos que la nómina encabezada por Mauro Pildaín: 6.672, equivalentes al 10,69% de quienes participaron en la interna del FrePam.
La derecha, blancos y nulos
- Carlos Mac Allister fue la vedette de las PASO. Pero moderadamente: su caudal de votos no llegó al 10%, según las cifras oficiales. Propuesta Federal cosechó 19.314 sufragios, que representan el 9,85%. Buena parte de los votos a Mac Allister parecen provenir del sector que en 2011 propició la candidatura de Rodolfo Landucci, que aquella vez sacó 17.493 votos, que representaban el 10,27%. Esta vez, un representante del mismo espacio político-ideológico, Darío Hernández, apenas sacó el 3% (6.050 votos).
- En 2011, David Matzkin cosechó 14.428 votos (8,47%). Esta vez, la fórmula que integró Miguel Matzkin -compañero de fórmula de Adriana García en “Frente Renovador”- llegó a 3.081 (3,14%).
- En síntesis, puede decirse que las fórmulas de derecha o centroderecha agrupadas, y con furioso perfil anti-K, obtuvieron en estas PASO alrededor del 17% de los votos, un porcentaje similar al que en 2011 optó por el mismo sector (aquella vez Landucci y Matzkin, sumados, rondaron el 19%).
-Poco impacto tuvo en el comicio del domingo pasado el voto en blanco, pese a que en las elecciones legislativas suele darse un crecimiento de esa opción. Hubo apenas 3.029, lo que representa el 1,54% de los sufragios. En cambio, hubo más votos nulos: 6.543 (3,22%). Una proporción de este último dato hay que buscarla en cierta confusión que pudo reinar en una porción de la ciudadanía respecto del modo de votar: hubo, por ejemplo, quienes interpretaron que podían participar en distintas internas al mismo tiempo, cuando solo debían colocar una sola boleta en el sobre. Los que pusieron dos, en realidad anularon su voto.
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