Para los dirigentes políticos oficialistas, por ejemplo, se produjeron mejoras sustanciales. Además, aseguran que el transporte público de pasajeros, concesionado a las firmas Plaza y Rastreador Fournier, se verá mejorado a partir de la pavimentación de las calles de tierra y la continuidad de los controles.

En cambio, para un sector de la oposición, el Estado municipal debe involucrarse de manera directa en la prestación, conformando una empresa mixta con el sector privado.

El secretario municipal de Gobierno, Fabián Lliteras, dijo ayer que el Ejecutivo trabaja a diario para que la calidad de la prestación mejore continuamente, a partir de controles en las unidades y las frecuencias, más encuestas a los usuarios.

"Creemos que el sistema tiene un buen desempeño, pero también es cierto que presenta problemas por los imponderables que lo afectan, como el estado de las calles y la rotura de unidades. Desde mediados de 2010 a la actualidad la situación mejoró y todos coinciden en que hubo mejoras", expresó.

Lliteras dijo que fue un avance contar con la información proporcionada por el sistema satelital GPS, vinculada con las frecuencias y recorridos.

"Si alguna de las empresas comete alguna infracción podemos sancionarla, algo que antes no era posible", indicó Lliteras.

Para la concejala oficialista Soledad Espina (FPV-PJ), el gran número de cuadras de tierra que conforman los circuitos establecidos causa demoras en las frecuencias y roturas de unidades. Por esta razón consideró necesario que el Concejo Deliberante apruebe los proyectos de pavimentación enviados por el Ejecutivo.

"En una ciudad donde todas las líneas recorren muchas cuadras sin asfalto, intransitables durante algunos días, es sabido que se pierden frecuencias, se ensucian y se rompen las unidades. Por lo tanto, para mí, la condición número uno es que se les dé tratamiento y se aprueben los planes de pavimentación que se encuentran en el Concejo", opinó.

Con la mira en Plaza

Para el concejal Oreste Retta (UCR), la mala prestación del servicio por parte de Plaza amerita que la Municipalidad analice la quita de alguna o varias líneas a esta compañía, para comenzar a prestar el servicio mediante la conformación de una empresa mixta público-privada.

"Hay errores graves como la frecuencia, porque una cosa es que el colectivo tenga problemas y otro es que directamente no pase. En el caso de Plaza, creo que debe pensarse en reemplazarla en alguno de los combos de líneas que tiene a cargo. Entiendo que sería posible prestar el servicio con una empresa mixta, mayoritariamente estatal, compuesta por firmas locales a las que les interese participar. Ese sistema está dando resultado en Rosario. Aquí Rastreador Fournier ha tenido contemplación por el usuario, pero lo de Plaza ha sido desoír o tratar de justificarse, en vez de ponerse a solucionar los problemas", dijo.

Para Cristina Molina (Unión Pro), cuando se analice un nuevo aumento de la tarifa de ómnibus debe afectarse un porcentaje de ese incremento para que, sumados a subsidios municipales, las prestatarias cuenten con fondos para renovar sus unidades.

"Hay dos problemas: la falta de coches en las líneas de Plaza y la antigüedad de las unidades de ambas prestatarias. Las medidas restrictivas que pesaron sobre las empresas a partir del incumplimiento de Plaza, como el retraso en el aumento del boleto y la quita de los subsidios, terminaron desfinanciándolas a las dos, lo que derivó en la imposibilidad de renovar las flotas", indicó.

Críticas de tres candidatos a intendente

El concejal y candidato a intendente Raúl Woscoff, de Integración Ciudadana, anunció que próximamente darán a conocer un documento sobre el transporte público.

Entre otras cosas, Woscoff adelantó que propondrán que el Ejecutivo resguarde su facultad de retener las unidades en caso de quitarle la concesión a alguna empresa. Dijo también que promoverán la realización de una encuesta de satisfacción a los usuarios y la implementación de carriles exclusivos para micros.

El senador provincial por el Partido GEN y postulante a intendente del Frente Amplio Progresista, José María Zingoni, indicó: "La situación actual amerita que el municipio se involucre en la operación del servicio ya que no veo la posibilidad de que el sector privado pueda alcanzar un buen desempeño, sólo por concesión. Hay que evitar que sigan bajándose pasajeros del sistema, desde que se concesionaron estos combos se perdió un tercio de los pasajes".

Zingoni dijo estar decidido a implementar un sistema público-privado. Agregó que es necesario que el municipio mejore la comunicación y planificación del servicio, puesto que "no se conocen los recorridos ni el plan de pavimentación que se quiere implementar en el corto plazo".

Más duro fue el candidato a jefe comunal de la Unión para el Desarrollo Social (Udeso), Martín Salaberry, quien sostuvo que, en caso de llegar al gobierno, sí o sí va a rescindir el contrato de Plaza y generará un sistema de transporte con una empresa mixta (pública-privada).

"De lo contrario se dejará sin respuesta a 90.000 bahienses que, día a día, rezan para que les pase algo tan básico como un colectivo", señaló, mediante un comunicado de prensa.

Afirmó que el gobierno municipal no defiende al vecino. "Desde que se puso en marcha el sistema, Plaza viene incumpliendo sistemáticamente todo lo pactado. La actual gestión municipal prometió el mejor transporte del país y nos ha dejado sin transporte".

En cifras

* 16 líneas de colectivos urbanos funcionan en nuestra ciudad: 8 están a cargo de Plaza, 4 de Mayo-Sata (dependiente de Plaza) y 4 de la firma bahiense Rastreador Fournier.

* 3.600 son aproximadamente las calles de tierra en Bahía Blanca. El Concejo discute en estos momentos distintos proyectos de pavimentación, los cuales mejorarían el servicio.

Qué dicen los Usuarios Testigos

Una de las integrantes de la Comisión de Usuarios Testigos del Concejo Deliberante, Bibiana Dicek, sostuvo que la calidad del servicio es regular.

"Hay mucho para mejorar. En primer lugar, el incumplimiento de las frecuencias y la cantidad de las unidades. También hay otras cosas que hacen a la calidad del servicio, como la higiene, el mantenimiento de las unidades y la antigüedad", dijo.

Opinó que, en primer lugar, debe mejorarse el servicio manteniendo este sistema de concesión.

"Para que esto se optimice, en primer lugar debe aumentar la comunicación entre los usuarios, la empresa y el Ejecutivo, que es quien tiene el poder de tomar las decisiones. Tienen que escuchar a los usuarios, mediante la creación de una línea telefónica, y actuar en consecuencia, con multas y sanciones si corresponde.

"También creemos que puede mejorar el servicio si se obtiene información del GPS en el celular del usuario, para que la gente sepa cuándo y por dónde pasarán los colectivos. Asimismo, creemos que se podrían realizar pequeñas modificaciones en los recorridos para acortar la cantidad de kilómetros sin afectar a la gente", señaló Dicek.