Los integrantes de la lista de Pallares, el armador natural del massismo en el distrito, amenazaron con bajarse de la lista si se persistía en sostener al candidato del PRO. En esa línea, Russo, Beroldo, Lozano, Torres y alguno más, hicieron fila para reclamar una decisión al respecto. La información advirtió que Pallares levantó el teléfono y le dieron vía libre para decidir sobre el tema. El resultado fue que Grindetti irá como PRO, pero con lista corta y el massismo volverá a la vieja e inicial lista de Russo, Noelia Quindimil y Alberto Torres.

Confirmada la especie por militantes del Pro que se quejan amargamente por lo que consideran “falta de trabajo político”, es decir, no hubo un trabajo de pegatina de afiches y, según su palabra, “No se juntaron los avales que son 1.200 firmas”, queda por esperar como se definirá la situación del macrismo, con lo que quedaría en juego y con posibilidades, el oficialismo que disputará una interna con Omar López, el Frente progresista con La Rosa, Folino y Rodríguez con otra interna donde figuraría Alberto Cusano y el Frente Renovador, aparentemente definido ya que es improbable una interna con Di Masi que, con el aporte de votos de los pibes de 16 años, la plataforma subió y necesitaría un caudal de votos del orden de los 12 mil, cifra difícil de conseguir sin una campaña previa y con tan poco tiempo.