Los dirigidos por Silvio Santander están 0-3 y, de caer nuevamente, quedará cerrada la serie.

Regatas se impuso en los dos juegos en el José Jorge Contte, por 90-64 y 65-55, mientras que el lunes ganó en el estadio del Antonio Rotili, por 78-76. De volver a conseguir un triunfo, el Fantasma igualará al Atenas de Córdoba de Marcelo Milanesio, Héctor Campana, Fabricio Oberto y Diego Osella, que barrió al Boca Juniors de Néstor `Che` García, en la final de la temporada 1997-1998.

Lanús no tiene otra alternativa que ganar y así trasladar la serie a Corrientes, donde el próximo lunes se jugaría el quinto partido. Hasta el momento, Regatas demostró ser superior, tanto en lo individual como lo colectivo, porque impuso la madurez, inteligencia, efectividad y personalidad de sus jugadores para disputar este tipo de finales.

En los tres partidos, el equipo correntino edificó su supremacía a partir de una muy buena defensa, bien asistido por el talento de Javier Martínez en la conducción (le ganó ampliamente el duelo a Nicolás Laprovíttola).

Asimismo, se apoyó en la contribución de Federico Kammerichs bajo los tableros y en la devastadora tarea del tirador Paolo Quinteros (promedia 21,8 puntos en la serie).

"Ganamos un partido de visitante que era nuestra asignatura pendiente en los play offs. Tenemos que ganar uno de los cuatro que faltan. Lanús es un gran rival, lo demostró remontando una desventaja de 15 puntos", señaló el director técnico del conjunto correntino, Nicolás Casalánguida.

Y agregó: "Ganamos porque entramos bien en ataque, dominamos durante 32 minutos y luego por los bombazos de (Lionel) Schattmann y errores nuestros en los lanzamientos y tiros libres, los hicimos volver al partido. Por suerte, cerramos bien y nos quedamos con la victoria", argumento el técnico.

En Lanús no hay alternativa posible más que la victoria. Para ello, el Granate deberá exhibir mayor concentración, no perder tantas pelotas, jugar con paciencia y seleccionar mejor los lanzamientos.

En la noche del lunes, de no haber sido por la certera puntería de Lionel Schattmann (21 puntos, con 6 de 7 en triples) y Fernando Martina (21) pudo haber perdido por una diferencia mucho mayor.

Para el DT Silvio Santander la clave estará "en trabajar en el aspecto psicológico. El grupo quedó muy dolido por la derrota”. “Dimos muchas ventajas y recién al final reaccionamos. Igual no merecíamos ganar, Regatas fue muy superior", indicó.

"Tenemos que pensar en ganar mañana (por hoy), porque estos jugadores se lo merecen por todo lo que hicieron en el año", concluyó.

Regatas está muy cerca de hacer realidad el sueño de campeón: le queda solamente un escalón para llegar a lo más alto, festejar y ponerle un broche de oro a una brillante temporada, donde se quedó también con la Liga Sudamericana y el Súper 8.