Había sido nombrado en 2012 tras los incidentes entre La Cámpora y uniformados en la Legislatura.
A través de una resolución interna, Granados quitó del cargo de director del Servicio Centralizado de Infantería al comisario mayor Carlos Alberto Andrada y en su lugar nombró a Roberto Vargas.
Voceros del ministerio de Seguridad confirmaron la salida de Andrada e indicaron a esta agencia que el cambio se produjo por “razones operativas”.
Andrada había sido nombrado al frente de Infantería en enero de 2012, pocos días después de un acuartelamiento que realizaron policías para repudiar la sanción de 6 oficiales que participaron de la represión a los militantes de La Cámpora el día de la asunción de Daniel Scioli en 2011.
Sin embargo, a finales de diciembre de 2013, Andrada no pudo contener el reclamo salarial de la Infantería que salió a la calle a protestar. Esa situación generó la adhesión de otras dependencias y que terminó con un aumento del 50 por ciento para la fuerza.
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