Con la ayuda de brigadistas del Plan Nacional de Manejo del Fuego, y con 4 aviones hidrantes que se sumaron en los últimos días, el incendio logró ser cercado, aunque aún restan lugares activos, los que son combatidos a fin de evitar que se extiendan a partir de las fuertes corrientes de viento en la zona.

En la jornada de ayer los combatientes se encontraban abocados a controlar la zona sur del extenso terreno afectado por las llamas, con personal a pie, maquinaria pesada y con los camiones hidrantes. Y luego, estaba previsto que la atención se centre en la “cola del incendio”, en la zona central donde según describió el coordinador provincial de Manejo del Fuego, Ezequiel Morales “hay mucha actividad y brasas” por la gran cantidad de madera vieja, arbustos y pastizales.

Afortunadamente las condiciones meteorológicas acompañaron con el descenso de temperaturas en los últimos días, pero “tenemos que estar atentos, porque sigue corriendo mucho viento”, ya que podría reavivar las llamas en donde por estas horas hay brasas. Además de que salten a espacios que aún no fueron afectados. En ese sentido Morales detalló que hay mucho bosque secundario, arbustos y pastizales que si son alcanzados por las llamas, éstas pueden avanzar con extrema facilidad.

Por último Morales señaló que el incendio podría ser controlado y sofocado en los próximos días. Y que de mantenerse las condiciones frías sería controlado mañana, para inmediatamente proceder a la “guardia de cenizas”, procedimiento por el cual se sofoca completamente el incendio, lo cual podría ocurrir el próximo viernes, concluyó.