"Cautamente optimistas", es el término que mejor define el ánimo en la Casa Rosada respecto al resultado electoral de este domingo. Descuentan una victoria en el interior del país pero son conscientes que los números en la provincia de Buenos Aires están muy dudosos. De todas maneras, algunas encuestas los muestran casi empatando con Cristina de Kirchner o en algunos casos superándola. Aunque, se atajan a aventurar victoria admitiendo que "aún hay muchos indecisos".
Tanto para el presidente Mauricio Macri como hasta el último de los colaboradores esta elección se ha convertido en una especie de encuesta respecto a si realmente la sociedad optó por un cambio.Cuando se les pregunta cuál es el cambio el que supuestamente votó la gente la respuesta no se demora: "la lucha contra la corrupción, el narcotráfico, la pobreza", responden.
Metas que difícilmente sean rechazadas por los adherentes a los partidos de la oposición. Sin embargo, la diferencia es que, de acuerdo a la visión oficial, esperan que la gente confirme con el voto, que solo Cambiemos puede llevar esas peleas a cabo.
De todas maneras, el caminar las calles los llevó a la conclusión de que necesitaban apuntalar a Esteban Bulrrich y "jugaron a la Dama" o mejor dicho a las dos mujeres fuertes del partido gobernante: la gobernadora María Eugenia Vidal y Lilita Carrio.
A pesar de que la estrategia oficial era que "no importa quién es el candidato porque la gente votará el Cambio" y por esta razón se sacó de carrera a Lilita en la provincia; la realidad y los números de las encuestas se impusieron y tuvieron que apelar a las figuras con más popularidad y buena imagen para así restarle votos a Cristina.
Siempre se dijo que las elecciones se definen en la provincia de Buenos Aires ya que representa al 36% de todo el país.
La apuesta no pasó solo por mostrar a Bullrich acompañado de las dos mujeres fuertes de Cambiemos sino también acelerando las obras de pavimento, cloacas, entre otras.
A diferencia de la oposición que sostiene que no hay trabajo, que los precios no paran de subir, que se recortan beneficios a los jubilados, entre otras críticas, en la Rosada replican con datos. "La inflación en julio fue de 1,7%; la economía ya está creciendo y el consumo lentamente va mejorando", afirman.
Explican que los préstamos hipotecarios no paran de crecer -solo el Banco Nación otorgará este año 20.000 créditos- y con la baja de la inflación, objetivo prioritario para Macri, la demanda aumentará.
En tanto, en los sectores más humildes, también le rescatan al Gobierno, siempre según fuentes oficiales, la lucha contra el narcotráfico. "La mayor presencia de personal policial o gendarmería es un elemento que en los barrios más humildes es valorado", aseguran.
Por eso, en la Casa Rosada, hay optimismo por el resultado de las PASO de este domingo y aventuran que "una victoria nos dará mucha más fortaleza para las elecciones de octubre".
El propio Macri lo señaló: "Vamos a confirmar que hemos elegido el camino correcto. Seguiremos trabajando y seguiremos dialogando para mejorar la calidad de la justicia, la calidad institucional. Cuando confirmemos todo esto el año que viene creceremos más que este año", en el reportaje que le hiciera Santiago del Moro este miércoles.
Mientras tanto siguen trabajando en las tres grandes reformas para presentar a la sociedad después de las PASO de octubre: la reforma laboral, tributaria y del Estado.
Estos proyectos que se manejan a puertas cerradas serán parte de la gran transformación que aspira el Gobierno llevar a cabo: bajar la pesada carga tributaria, facilitar la incorporación de personal, y reformar el Estado para que sea más eficiente.
Apuestan a que una victoria electoral les dará la fortaleza necesaria para sentarse con los partidos opositores y las provincias para lograr los acuerdos necesarios y continuar avanzando con la transformación de la Argentina.
Este lunes al menos se despejará una incógnita: si el resultado electoral de octubre se basó más en un rechazo al gobierno anterior o realmente un sector de la población quiere un cambio de estilo y de gestión.
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