Al respecto, Pierazzoli explicó que los números del Proyecto de Presupuesto enviado a la Legislatura Provincial, consideran el incremento de recursos provistos por el Estado Nacional, el cual “sirve para sostener y llevar adelante con previsibilidad financiera los gastos que hoy ya afronta la provincia”, teniendo en cuenta que ese incremento de gastos conlleva la “política salarial y las políticas fiscales llevadas adelante por el Gobierno provincial, en materia de seguridad, salud y educación”.

Según explicó Pierazzoli, el presupuesto en números “establece una necesidad de financiamiento de más de 1.300 millones” solicitando al Poder Legislativo, la autorización para que la provincia pueda endeudarse por ese monto, “para hacer frente a los gastos que hoy ya está afrontando la provincia” y preverlos para el año que viene.

“Nosotros sabemos que más del 75% de los recursos con que cuenta la provincia se encuentran dentro del marco macro fiscal del Presupuesto Nacional, de tal forma que la necesidad de financiamiento que tiene la provincia se encuentra enmarcada, lógicamente, dentro de este Presupuesto Nacional”, sentenció.

Por esta razón, destacó que resulta imperante discutir y debatir el Presupuesto “con seriedad” para tener “esta Ley aprobada” a finales de noviembre, porque “la provincia requiere y necesita del financiamiento nacional para llevar adelante los pagos normales y habituales”, como así también para salir en busca de “más financiamiento”. Por todas estas cuestiones, “la Nación exige que tengamos aprobado el presupuesto lo más rápido posible”, enfatizó.

Asimismo, Pierazzoli manifestó que fueron enviados a la Legislatura dos proyectos más, por un lado el Nuevo Código Fiscal, que brindará una herramienta a la Dirección Provincial de Rentas para “combatir el comercio informal”, con el “reacomodo de los procedimientos fiscales”; y por el otro, la Prórroga de la Ley de Emergencias y la Ley Impositiva la cual “contempla adecuaciones de tazas, no de impuestos, de los servicios que presta el Estado”. Estas adecuaciones tienden fundamentalmente, a buscar una equiparación entre el servicio que presta un organismo o una repartición y el beneficio que se recibe por ese servicio.