Tras el cierre de las exportaciones de carne vacuna decretado el pasado 20 de mayo y que vence este domingo, el Gobierno mantuvo conversaciones y negociaciones, sobre todo, con el sector exportador. Habrá un "Plan ganadero".
El Gobierno nacional anunciará la semana próxima un nuevo esquema de exportación de carne vacuna y la puesta en marcha de un plan ganadero en pos de ordenar el mercado y contener los precios del producto, los cuales en mayo sumaron un nuevo aumento y acumularon una suba interanual del 72,9%, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Este nuevo esquema, que en principio se presentará el martes, buscará garantizar "que esté bien abastecida la mesa de los argentinos", sostuvo estos días el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, en declaraciones a diferentes radios.
"El objetivo es garantizar que exista un abastecimiento mayor del mercado interno, con un esquema que permita garantizar mayor presencia en el mismo", indicó Kulfas, al mismo tiempo que planteó que el Gobierno quiere "que todos los cortes populares estén accesibles".
Según comentó el ministro, se realizaron "varios encuentros de diálogo y negociación con sectores de la producción y exportación de carne. Les hemos explicado que el objetivo principal es ordenar el funcionamiento del sector y también producir más, porque la salida virtuosa a esto es justamente que Argentina pueda superar la barrera histórica de tres millones de toneladas".
Este último punto tiene que ver con el Plan Ganadero que también se dará a conocer el martes, el cual, si bien no trascendieron detalles de manera oficial, tendrá como objetivo llevar la producción de carne vacuna de las tres millones de toneladas actuales a cinco millones, logrando una "salida virtuosa" que permita descomprimir la tensión entre mercado interno y externo.
Según comentaron fuentes oficiales a Télam será el propio presidente Alberto Fernández quien explicará a los diferentes actores de la cadena los "objetivos" de la iniciativa, y "trabajar en el plan y también contarles cuáles son los instrumentos de ese proyecto y consensuar con el sector algunas medidas".
Tras el cierre de las exportación de carne vacuna decretado por el Gobierno el pasado 20 de mayo y que vence este domingo, el Gobierno mantuvo conversaciones y negociaciones, sobre todo, con el sector exportador, que acercó algunas propuestas al Ejecutivo para destrabar la situación.
También mantuvo semanas atrás una reunión el propio Alberto Fernández con representantes del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), tras un pedido de audiencia.
Sin embargo, hasta el momento, las que quedaron excluidas de las conversaciones fueron las entidades nucleadas en la Mesa de Enlace, que tras haber llevado adelante un cese de comercialización de dos semanas en rechazo a la medida oficial de suspensión temporal, pidió una audiencia al Presidente, que hasta la fecha, no fue concedida.
Los titulares de la Sociedad Rural (SRA), Confederaciones Rurales (CRA), Federación Agraria (FAA) y Coninagro mantuvieron un encuentro en la sede porteña de esta última con representantes del Consorcio de Exportadores ABC para interiorizarse de las negociaciones,.
Tras la reunión adelantaron que rechazarán cualquier medida del Ejecutivo que signifique una restricción a las exportaciones y que, en tal caso, consultarán a las bases "los pasos a seguir".
La carne vacuna tuvo un crecimiento exponencial de precios desde octubre/noviembre del año pasado y, tras el correr de los meses, no detuvo su marcha alcista.
Según el Indec, en mayo el precio de la carne y derivados subió 4,4% respecto de abril y acumuló una suba del 72,9% interanual, a pesar del cierre de exportaciones que comenzó el 20 de mayo.
Tanto en la comparación con el mes pasado como con mayo de 2020, la suba se muestra por encima del Índice de Precios al Consumidor (IPC) el cual tuvo un incremento del 3,3% y un acumulado del 48,8%.
Esto significa que la carne su ubicó casi 25 puntos por encima del promedio de los precios de la economía, De hecho, tomando en cuenta todos los rubros medidos por el Indec, carnes y derivados presenta el mayor aumento interanual.
Para el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), la suba del precio de la carne se centra en cuatro puntos fundamentales: el aumento de las exportaciones; la suba del maíz; el incremento en el valor de la hacienda y en la formación de precios en la cadena de producción.
En el primer punto, el informe habla de una suerte de estancamiento de la producción de carne, que ante un fuerte aumento de la exportación en los últimos años "se quedan con una parte de los cortes enviados al mercado interno".
"Este incremento en el volumen exportado tensiona la política comercial, ya que, por un lado, mejora la balanza comercial proveyendo de una parte de las necesarias divisas que requiere el país, pero, por otro lado, impacta en los precios internos", explicó.
También está el marcado aumento en el precio internacional del maíz, insumo básico sobre todo para el engorde en feedlot, aunque la participación en el costo del animal ya engordado no alcanzaría el 8%.
En tercer lugar, aparece el incremento en el precio de la hacienda, que en el caso del novillo tuvo una suba en los últimos 12 meses del 120% en el mercado de Liniers, según CEPA.
Por último, mencionó la "distorsión en la formación de los precios en la cadena de producción y comercialización de carne vacuna producto del accionar de frigoríficos con control sobre la misma".
Comentá la nota