Con un nuevo gobernador electo, el ambiente político se centra entre los que salen y los que entran, por lo que durante la mañana de este martes se reunieron los equipos técnicos de economía del Gobierno de Mendoza con los representantes de Cambia Mendoza, Martín Kerchner y Enrique Vaquié, para conocer la situación de las cuentas públicas. Al finalizar, los funcionarios informaron que la provincia cuenta con una deuda de 750 millones de pesos en órdenes de pago en tesorería, sin contar lo adeudado a proveedores, IPV, Juegos y Casinos ni OSEP.

"Hemos podido comenzar mirando la situación general de la Provincia: la situación no es de comodidad, pero requiere más información", resumió Kerchner. El diputado radical señaló la existencia de descalces financieros entre los ingresos y gastos públicos, por lo que solicitó un flujo de fondos que el oficialismo proyecta a fin de año para conocer la magnitud del problema.

A partir de esos datos es que los representantes de Cambia Mendoza continuarán trabajando con el gobierna actual en busca de medidas que permitan "la entrega de un mandato con equilibrio". Sin embargo, tanto Kerchner como Vaquié fueron cautelosos al momento de enumerar cifras, para no entorpecer las relaciones con la actual gestión.

"La información a la que hemos ido accediendo primero la compartiremos con Cornejo, y en función de lo que vayamos obteniendo del tesorero iremos bajando esos números al ministerio de Hacienda y a los organismos descentralizados que se enceuntran en una situación a evaluar como Osep, Juegos y Casinos, y el IPV", informaron los radicales.

A esta deuda registrada, también deben sumarse las cuentas pendientes con organismos públicos, municipios y subsidios otorgados, según detalló Kerchner, quien señaló como asunto más crítico el pago de los sueldos. De hecho, el Banco Nación autorizó este mismo martes el sobregiro para la Provincia de 1.000 millones de pesos con el objetivo de que se depositaran los haberes. Aún así, por un "cruce de archivos con la entidad", según definio el ministro de Hacienda, Juan Gantus, los salarios no se pagaron aún en la Legislatura.

Una transición en armonía

Sobre las especulaciones de la siguiente gestión respecto a la deuda existente, los radicales prefirieron no emitir comentarios. En palabras de Vaquié, "es central que se mantenga el clima actual de colaboración, por eso queremos se prudentes con las declaraciones".

Además, tanto el equipo de Pérez como el de Cornejo recibieron la orden de mantener el diálogo cordial para continuar hasta el 10 de diciembre con el menor sobresalto posible. "Seguramente cuando charlemos con el gobernador electo demos una situación más precisa, por ahora sólo mencionamos que no es un panorama holgado", manifestó Vaquié, quien insitió en mantener prudencia para que las relaciones con el justicialismo se mantengan durante los cuatro años siguientes.

Aún así, el diputado nacional adelantó que el Estado tiene funcionarios que han tratado con proveedores o conseguido recursos sin que estén autorizados por la ley de presupuesto. "Esto hay que trabajarlo porque no corresponde; nosotros vamos a acompañar, pero es un tema de este gobierno, ellos mismos se encuentran preocupados por la situación".

Por lo tanto, la transición continúa enfocada en construir el número total de la deuda pública, que también desconoce el gobierno de Pérez, según afirmaron ambos equipos.

Gantus, por su parte, anunció que se trabaja en una agenda con la presencia de los distintos ministros de la administración y de todas las jurisdicciones para tener un dato consolidado de la posición financiera de Mendoza. "Es una deuda que, si existiera, no está registrada, hay que revisarla entre todos", señaló.

Respecto al objetivo planteado por el gobernador de termianr el año con déficit cero, el ministro mencionó que "se trabajará para llegar a diciembre con las cuentas ordenadas y que el nuevo gobierno no tenga sobresaltos, cumpliendo con todas las obligaciones que tenemos asumidas". Así, también destacó que el equipo financiero de Cambia Mendoza cuenta con una copia del convenio macro que se realizó con el Banco Nación.

En dicho acuerdo, se establecieron las mismas condiciones que en el anterior, con el agregado de una mayor capacidad de préstamo, mayor asistencia financiera, y otros detalles contemplados como la presencia de cajeros automáticos en distintos departamentos. "Se debe tener una relación más directa con los proveedores, por lo que hemos pedido al Banco la posibilidad de hacer descuentos, también hemos agregado tasas subsidiarias para las pymes y una serie de instrumentos que sirven para potenciar el sector económico de la provincia", detalló Gantus.