Excepto por un par de declaraciones discordantes con el resto, la reunión del Salón Azul del Senado pareció una coreografía ensayada donde cada figura sabía qué decir.
Después de que unos 15 gobernadores y vices manifestaran su respaldo contundente al Pacto Fiscal y pidieran el voto de los senadores, el jefe del FpV, Miguel Ángel Pichetto, planteó lo que en los pasillos reclamaban sin estridencias los mandatarios: un cambio en el cálculo de la actualización trimestral de las jubilaciones.
Jorge Triaca, ministro de Trabajo, tomó el micrófono mientras repartían copias del artículo 32 con la nueva redacción propuesta, agradeció y dijo: "Déjeme que analicemos la alternativa con el titular de la Anses". Diez minutos después, discurso y crítica del senador José Mayans mediante, Triaca solicitó la palabra nuevamente y anunció: "Quiero decirles que analizamos la propuesta de Pichetto, va en la misma línea de los objetivos que tenemos, estamos de acuerdo".
La crónica de la jornada arranca con una cita a las diez en el primer piso del Palacio Legislativo para la reunión conjunta de las comisiones de Trabajo y Previsión Social y de Presupuesto y Hacienda. En el temario se incluyó el proyecto de ley de Consenso Fiscal, suscripto el 16 de noviembre, y el proyecto de ley de Reforma Previsional.
Por el Gobierno fueron invitados el ministro del Interior, Rogelio Frigerio; el de Hacienda, Nicolás Dujovne; el de Trabajo y el titular de la Anses, Emilio Basavilbaso. Por los gobernadores estuvieron los oficialistas María Eugenia Vidal (Buenos Aires); Horacio Rodríguez Larreta (Capital); Gerardo Morales (Jujuy); el todavía gobernador de Corrientes Ricardo Colombi y la vice mendocina Laura Montero. Por la oposición estuvieron Juan Schiaretti (Córdoba); Rosana Bertone (Tierra del Fuego); Juan Manuel Urtubey (Salta); el vice de Tucumán, Aldo Jaldo; Hugo Passalaqua (Misiones); Gustavo Bordet (Entre Ríos), el rionegrino Alberto Weretilneck, además de Gerardo Zamora, renunciante senador que asume en diciembre como gobernador de Santiago del Estero. Chaco mandó a un ministro y por San Luis Alberto Rodríguez Saá rompió la armonía con el único discurso duro y como no firmante del pacto.
Los gobernadores defendieron sin dudar el pacto firmado, pero dentro del salón ninguno hizo mención a la cuestión previsional. "Vamos a hablar ahora con Pichetto", dijo un mandatario mientras se veía al jefe de los senadores que por momentos se retiraba de la sala a una contigua o conversaba en un rincón. Incluso en un momento Pichetto tuvo un aparte con el ministro de Hacienda bonaerense, Hernán Lacunza, y luego Frigerio se retiró a Presidencia y al mismo lugar fue Pichetto. Volvieron después de que hablaran dos de los mandatarios.
Durante la última semana Pichetto mantuvo conversaciones permanentes con los gobernadores por el cálculo previsional. Resultado de esas charlas y de lo que parecieron charlas con el Gobierno que no quisieron confirmar pero que resultaron evidentes, el senador leyó la nueva redacción del artículo 32 y reclamó que "el salario previsional tiene que mantenerse, no puede perder, la propuesta del Gobierno es muy pobre, muy magra" en referencia a la combinación del índice de inflación y el PBI. "Primero, nadie lo puede entender y segundo, es muy poco; según un artículo periodístico el aumento es de $20" cuestionó, y también puso en duda la credibilidad de los índices (sin hacer mención a gestión alguna) y el aumento superior a la inflación de los medicamentos, lo que impacta fuertemente en las jubilaciones.
Lo que propuso Pichetto y aceptó el Gobierno (a los ministros se los vio intercambiar palabras sentados en la cabecera) es calcular el reajuste jubilatorio trimestralmente, en marzo, junio, septiembre y diciembre en base al índice de inflación calculado por el Indec (70%) y al coeficiente de la variación de la remuneración imponible promedio de los trabajadores estables, el RIPTE (30%) que calcula el Ministerio de Trabajo y que por ejemplo en el primer trimestre de este año fue 7,7% frente a 6,1% del IPCN; en el segundo de 5,3% y 5,4%; y en el tercero de 7,1% y 5,1%, respectivamente.
El senador Miguel Pichetto acordó quitar de la nueva fórmula de movilidad jubilatoria el componente anual de una mínima fracción de la variación del PBI y agregar el 30% de la variación del RIPTE, junto al 70% de la tasa de inflación, en ambos casos del trimestre previo
En la ronda de exposiciones, Schiaretti calificó como "el pacto de la sensatez" el acuerdo con el Gobierno que "elimina inequidades y avanza en la dirección de lograr el equilibrio fiscal y baja impuestos distorsivos", por lo que pidió el voto a los senadores. Urtubey habló en la misma línea y en un contacto aparte con periodistas reveló que iban a buscar un cambio en la actualización del haber jubilatorio, aunque siempre "algo razonable"."Les pedimos a los senadores que tengan en cuenta el esfuerzo que hicimos todos los gobernadores y nos acompañen en este consenso", manifestó Vidal, mientras que Bertone había asegurado que "si fuera senadora votaría a favor". Weretilneck por su parte recordó que es el resultado del trabajo de meses en conjunto" mientras que Bordet lo calificó como "beneficioso y positivo".
El único discurso opositor fue el de Rodríguez Saá. "San Luis no firmó ni va a firmar el consenso fiscal porque implica desistir de los procesos judiciales respecto al régimen de coparticipación sin ninguna compensación a cambio", criticó, y desmintió que haya posibilidad de diálogo con el Gobierno.
De todas formas, la iniciativa contó con Dictamen de Comisión, para ser próxima tratado en detalle en el recinto.
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