“Es un momento muy importante para nuestros pueblos aborígenes, ya que quedará en una página dorada de nuestra historia”, destacó el gobernador Domingo Peppo ayer al hacer entrega de los títulos de propiedad de más de 300.000 hectáreas de la Reserva Grande a las comunidades aborígenes (wichí, qom y mocoví) y pueblos criollos.
Desde el reservorio El Malá en Juan José Castelli y ante referentes de las tres etnias, el mandatario definió la medida como una verdadera reparación histórica y dijo: “Si bien es poco en relación con las tierras que les han quitado a lo largo de la historia, representa hoy la reivindicación de esa lucha por recuperarlas”. Asimismo, afirmó que desde el inicio de su gestión se dedicó a escuchar las posiciones y opiniones de cada uno de los actores, a fin de alcanzar consenso en beneficio de todos. Participaron del acto los ministros de Gobierno Juan José Bergia, de Seguridad Pública Martín Nievas; el presidente del Instituto de la Tierra Walter Ferreyra; la secretaria de Empleo Liliana Spoljaric; la titular del Instituto del Aborigen Chaqueño (Idach) Andrea Charole; la ex ministra de Desarrollo Social Marta Soneira y referentes de las tres etnias y de la comunidad criolla.
Indicó que la decisión política del Estado provincial de titularizar dichas tierras a nombre de los pueblos indígenas trasciende las fronteras de Chaco y del país, ya que se trata de la reserva más grande América Latina. “Estas tierras son para que los pueblos originarios vivan mejor; ese es el gran desafío que viene ahora. No deben utilizarlas solo para vender madera; no se dejen explotar”, les dijo y los llamó a administrar las hectáreas de la mejor forma.
Sostuvo así que inicia un tiempo nuevo de organización, diálogo y encuentro entre cada etnia respecto del uso de sus tierras y pidió que “sea en paz y con respeto”. “No tenemos que ser egoístas con el futuro, destruyendo todos los recursos naturales. Debemos pensar en un desarrollo con base en la sustentabilidad y extraer solo lo que necesitamos”, añadió.
En otro orden de cosas, el gobernador recordó que el proceso de audiencias y búsqueda de consenso entre las tres etnias comenzó hace muchos años y añadió que si bien fue un proceso difícil, hoy dio frutos. “En esa lucha vale destacar la entrega de muchos que pelearon por este sueño”, dijo y mencionó a Cacique Catán, Santos y Mario Charole, entre otros tantos referentes aborígenes. “A nosotros nos tocó el rol de la decisión, dando continuidad así al fuerte impulso que inició Capitanich y que es digno de reconocer”, dijo.
Por otro lado, Peppo felicitó a las tres etnias por el consenso alcanzado y valoró la “actitud reflexiva y la mirada superadora” de la titular del Idach Andrea Charole. “Tuvo la sabiduría de analizar la cuestión con amplitud, incluyendo a todos, aborígenes y criollos”, dijo al respecto. Por último ratificó el compromiso de trabajar por “el engrandecimiento de todos los habitantes indígenas y criollos”.
Gestiones de larga data
La iniciativa de regularizar el territorio de las más de 300.000 hectáreas de Reserva Grande, a las comunidades wichí, qom y mocoví data del gobierno de Danilo Baroni. Luego de varios intentos fallidos, y con el objetivo de no repetir la situación de las hectáreas de la Meguesoxochi, distintas áreas del gobierno provincial realizaron un exhaustivo trabajo de campo para confeccionar un proyecto de titularización que incluya a las 3 etnias y además a los pobladores criollos que habitan en el lugar hace muchos años.
Así, el gobierno provincial con sus propios recursos y el esfuerzo de profesionales del Estado, realizó las consultas públicas a las comunidades, quienes aprobaron el proyecto de subdivisión de tierras. La propuesta determina la división de mil hectáreas para cada comunidad, la desafectación de caminos, canal, anexos escolares, puestos sanitarios, la regularización de los pobladores criollos por parajes y la conservación del Parque Provincial de Fuerte Esperanza.
Luego el Instituto de Colonización realizó el proceso de mensura que aprobado por la Dirección de Catastro y en paralelo, cada comunidad se constituyó en una asociación con figura jurídica para poder recibir hoy las escrituras, de lo que será la reserva aborigen más grande del país y de Latinoamérica.
Paz social para comunidades
La presidenta del Idach Andrea Charole manifestó un profundo agradecimiento a funcionarios del gobierno anterior, como a los actuales, y a todos los que participaron del proceso para lograr, lo que señaló, como un “hecho histórico”, al que se llegó por consenso. “Es una reivindicación para todas las comunidades”, aseguró. Charole recordó que el acceso a la tierra para la comunidad no fue fácil; y destacó que los integrantes de las tres etnias aborígenes, “con valentía y solidaridad hacia los hermanos criollos, aceptaron que se pueda convivir con los hermanos criollos, porque el Chaco es una mezcla de razas”. “No queremos que ningún pueblo, sea cual sea, tenga que sufrir el padecimiento de ser despojado de su tierra”, aseguró. Además, la presidenta del Idach remarcó que “el pueblo está con el gobernador, porque bregamos por la paz social”.
Un derecho definitivo
“Es un día muy importante, de mucha emoción”, dijo el titular del Instituto de la Tierra Walter Ferreyra, al iniciar su alocución. Sostuvo que el presente acto de transferencia de dominio de tierras a los pueblos originarios es un acto de gobierno que trasciende esta gestión. “De esta forma, el Estado provincial reconoce los derechos de la comunidad aborigen de manera definitiva”, enfatizó.
El funcionario recordó que las gestiones comenzaron en el gobierno de Baroni, luego fueron olvidadas y retomadas por el exgobernador Capitanich. “Fue un proceso difícil pero siempre buscamos el consenso y hoy estamos viendo los frutos”, indicó. A la par, destacó la madurez de las tres etnias que reconocieron a la comunidad criolla que habitaba la reserva.
La jueza de Nueva Pompeya intentó frenar la entrega de tierras
CASTELLI (Agencia) - Una resolución de la jueza del Juzgado Multifueros de Nueva Pompeya, doctora Noelia Almirón, quiso poner freno a la entrega de los títulos de propiedad de las tierras de la Reserva Grande a partir de una presentación realizada por dos asociaciones comunitarias que plantearon una medida cautelar de “no innovar”, argumentando que se debe esperar el fallo del Superior Tribunal de Justicia sobre una acción de inconstitucionalidad respecto del proceso de titularización de las tierras.
En la resolución que se conoció ayer al mediodía, la magistrada manifiesta “hacer lugar a la medida cautelar de No Innovar, ordenando al Poder Ejecutivo Provincial se abstenga a partir de la notificación de hacer entregas de títulos de propiedad de las denominadas tierras Reserva Grande hasta la emisión de un pronunciamiento en los autos caratulados “Organización de los Pueblos Indígenas Mowitob S/ acción de Inconstitucionalidad”. Inmediatamente la letrada libró oficios al Instituto de Colonización del Chaco, al Poder Ejecutivo Provincial y a la Fiscalía de Estado “a fin de que tomen debida razón de lo ordenado en autos”.
Todo surgió a partir de una presentación realizada el miércoles 14 de diciembre en los Tribunales de Pompeya por integrantes de la Asociación Comunitaria Misión Nueva Pompeya y Asociación Comunitaria Niyaj, con el patrocinio letrado de la abogada Vanina Balverde, defensora oficial Multifueros. Entre otros puntos, cuestionan la constitucionalidad y la legitimidad de la resolución 2640 del Instituto de Colonización del Chaco con fecha 1 de diciembre de 2015 y de los sucesivos decretos del Poder Ejecutivo.
A través de dicha presentación, formalizaron el pedido de una medida cautelar de No Innovar a fin de que se suspenda la entrega de títulos de propiedad de las tierras de la denominada Reserva Grande hasta que el Superior Tribunal de Justicia del Chaco se expida en los autos caratulados “Organización de los Pueblos Indígenas Mowitob S/ acción de Inconstitucionalidad”.
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