La velada, que implica el renovar de un gesto anual a la “gran familia de la enfermería” formoseña como reconocimiento a quienes se desempeñan en la atención básica, promoción y rehabilitación de la salud.

Fue en el moderno polideportivo policial donde el primer mandatario junto a los ministros de Desarrollo Humano, Aníbal Gómez, de la Secretaría General del PE, Antonio Ferreira, de Gobierno, Jorge Abel González, de Economía, Inés Beatriz Lotto de Vecchietti, de Turismo, Alberto Areco, el intendente Fernando De Vido, el asesor del Poder Ejecutivo, Luis López Guaymás, además de profesionales médicos y enfermeras y enfermeros junto a sus familiares, quienes disfrutaron de una agradable reunión, que como se señalara insistentemente, “se trata de reconocer la tarea silenciosa y permanente que realizan los enfermeros como componentes esenciales del sistema de salud”.

Asimismo, se hizo notar desde esferas gubernamentales que “resulta fundamental esta profesión como actores fundamentales del proceso que deriva en la salud pública, concebida como política de estado y se brinda un merecido reconocimiento y homenaje a su diaria tarea en favor de la población formoseña”.

“Esta profesión requiere de sensibilidad humana y predisposición permanente a la solidaridad, dar todo de uno para que ese semejante pueda salir de algún difícil trance, y no hay mayor satisfacción cuando uno ve que esa persona se ha recuperado”, afirmó emocionada Sara Monzón, una de las referentes en la familia de las enfermeras que agradeció la deferencia del gobernador en brindarles el agasajo, algo que “renueva los espíritus y hace que se sienta acompañada”.

Durante la animada reunión, no pasó desapercibido el cariño de enfermeras y enfermeros para con el gobernador, quienes hasta llegaron a formar una extensa cola para fotografiarse con él. Incluso, un docente del sur del país que acompañó ocasionalmente a un enfermero familiar suyo a la fiesta, se mostró sorprendido por ver “como en ninguna otra parte del país, y eso que recorrí bastante, la gente le testimonia tanto cariño a un gobernante como es acá en Formosa con el doctor (Gildo) Insfrán”.

“Se trata de una profesión con intensas raíces humanísticas, ya que acompañan y cuidan a las personas en todos los procesos de la vida, y en especial a quienes experimentan una situación de enfermedad”, expuso el ministro Gómez, añadiendo que “la enfermería abarca los cuidados autónomos y en equipo, que se prestan a las personas de todas las edades, familias, comunidades, en todos los contextos, e incluye la promoción de la salud, la prevención de la enfermedad, los cuidados de los enfermos, sean niños, adolescentes, adultos, ancianos, discapacitados y mujeres embarazadas”.

“Es indudable que los cambios que se han producido en el sistema de salud han repercutido en el ejercicio de la enfermería, haciendo inevitable las innovaciones, de ahí que estamos avanzando de manera sostenida en contar con enfermeras altamente calificados y en número suficiente; condiciones y medio ambiente de trabajo digno y saludable, el permanente y sólido proceso de formación y jerarquización”, expuso finalmente.