El candidato del Movimiento Socialista de los Trabajadores cuestiona a los partidos tradicionales. Propone que los comisarios sean electos por el voto popular y llevar servicios a los barrios del oeste.
-¿Por qué participa de esta elección?
-Esta elección responde a la crisis de los partidos. En la superficie es la interna entre Fayad y Cobos, pero la parte de abajo es que los dos partidos mayoritarios están totalmente partidos. Nosotros tenemos muy pocas posibilidades de llegar a la gente masivamente y cualquier rendija que tengamos para poder llevar nuestra propuesta es buena.
-¿Quieren llevar el mensaje general del MST o tienen propuestas para la ciudad?
-Nosotros mezclamos. Uno tiene que responder a la política general, porque si no mentiría. Y por otro lado tenés que tener propuestas para el ciudadano, tampoco podés hablar del sexo de los ángeles. Es tan malo hablar sólo de que no hay que pagar la deuda externa y expropiar a los ricos, como decir que sólo barriendo las cunetas vas a solucionar los problemas de la gente. A la gente le decimos que tiene que cambiar y elegir a trabajadores.
Los radicales y los peronistas se han repartido el Gobierno de la provincia y el de la ciudad, y así nos va. Acá es muy fácil la asociación porque Jaque le hace la campaña al Viti y el Viti lo cubre a Jaque.
-¿Y cuál es la propuesta?
-Primero creemos que la Capital tiene a la gente con salarios de hambre. Fayad tiene gente que gana 700 pesos y lleva a la gente en camiones, sin ninguna seguridad. El Estado tiene que dejar de ser negrero. Lo segundo que planteamos tiene que ver con la forma en que se cobran los impuestos y las tasas. Tienen que pagar los que más tienen. Y lo cuarto es la seguridad.
-La izquierda ha estado ausente en este tema.
-En general nos dicen que el tema de seguridad es una bandera de la derecha, pero es mentira. Es un discurso caduco que ya demostró que no sirve para nada. Tenemos propuestas que se pueden realizar. Los equipos represivos no han solucionado nada, ni en París ni en Nueva York. Hay que combatir la corrupción policial, todos saben que los desarmaderos de autos están conducidos por comisarios, que hay zonas liberadas en la Quinta y otros lugares.
Pero nadie hace nada. Los estadounidenses tienen dos cosas muy buenas con esto, una es la elección democrática del sheriff. Acá sería muy eficiente elegir los comisarios así. Lo otro es dejar sindicalizar la policía. Hay que reventar la estructura de la Policía y democratizarla.
-¿Qué piensa de Fayad y su gestión?
-Creo que el tipo es hábil. No quiero ser peyorativo, pero tuvo mucha suerte de venir luego de un pasado terrible, que fue tener a Cicchitti antes, que además de ser de derecha tenía menos cintura que un pollo. Fayad tiene oficio y le han dado plata de afuera para que parezca una mejor gestión. Pero tiene un manejo discrecional, personalista, con una política de derecha terrible, con represión.
-¿Cómo ven el fenómeno de Pino Solanas en Buenos Aires?
-El fenómeno me parece altamente progresivo y positivo, aunque tenemos diferencias... Es bueno que la gente haya decidido votar por un mensaje nacionalista, protector, incluso con muchas banderas que compartimos.
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