Tiempo, no queda mucho. “Un degüello de soles muestra la tarde”, diría insuperablemente “Don Ata”. Sin embargo, la tarea aún no está cumplida. El terreno está arado pero la disputa por colocar las semillas discursivas que logren los mejores rindes en las urnas se estirará hasta el último instante. Al ser tan basto y variopinto el campo a sembrar, la rotación de promesas busca amoldarse a las necesidades y la temperatura socio-económica de cada zona.

Pero, en general, aparecen dos tipos de cultivos propositivos que prevalecen del resto, aplicándose cada uno de ellos a un área específica del electorado provincial. Para el conurbano, el combate contra la inseguridad y el narcotráfico parece ser un común denominador en las prioridades de agenda de Gobierno de los candidatos.

En tanto que, al realizar la tarea de labranza proselitista en el interior bonaerense, las políticas a destinar al sector agropecuario vienen siendo el eje central del discurso de quienes aspiran al sillón de Dardo Rocha cada vez que desembarcan a un distrito impregnado por el aire rural.

El gaucho quilmeño

A sabiendas de la animadversión que su figura despierta en varios distritos del interior bonaerense (en muchos de los cuales hasta perdió en las PASO cómodamente la interna con Julián Domínguez), el candidato a la Gobernación del Frente para la Victoria (FpV), Aníbal Fernández, ha reforzado su discurso dirigido al sector agropecuario, teniendo como caballito de batalla en materia de propuestas la futura creación, de ser electo, de una cartera agraria reforzada y con un perfil innovador, lo que el quilmeño denominó “un Ministerio de Asuntos Agrarios en serio”, definición que no cayó nada bien en las huestes sciolistas.

Sin embargo, mirando de reojo esta promesa, el titular de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), Horacio Salaverri, recalcó en diálogo con NOVA: “Este tipo de anuncios tiene que estar relleno de cómo se va a hacer. Una marquesina que diga ‘Superministerio’ no dice nada si no dice que hay dentro”.

En efecto, la desconfianza de la mencionada entidad ruralista hacia el jefe de Gabinete nacional creció luego de que el “bigotón” pegase el faltazo a la convocatoria realizada por CARBAP en la que los candidatos bonaerenses detallaron sus iniciativas para el sector.  “Entendemos que, en el camino hacia el diálogo, no es un buen paso”, observó Salaverri para añadir que la ausencia de Aníbal "deja un sabor amargo".

La revancha del “Topo”

Bajo ese contexto de broncas no subsanadas entre el campo y representantes del Gobierno Nacional como Aníbal Fernández, éste sábado el ministro de Asuntos Agrarios bonaerense, Alejandro “Topo” Rodríguez, deslizó una serie de frases con sabor a revancha por los dichos del quilmeño que lo tocaron de cerca.

Así, el funcionario sciolista espetó: "Daniel Scioli derrotará a la bronca y no se va a quedar enganchado en las peleas del pasado", agregando que "mientras la propuesta de la bronca siembra discordia, Scioli construye concordia y va a convocar a un gran diálogo agropecuario federal y nacional, para fortalecer la producción y garantizar que el que invierte para producir tenga rentabilidad".

Más allá de todo esto, Aníbal siguió con sus gestos hacia el campo, como los realizados días atrás cuando firmó con el ministro de Agricultura nacional, Carlos Casamiquela, convenios por más de 90 millones de pesos destinados a brindar asistencia a los productores bonaerenses afectados por las últimas inundaciones.

En tanto, Fernández prepara la presentación de su Ministerio de Asuntos Agrarios ampliado que se realizará en los próximos días en La Plata. Para esta cartera, suena el nombre del actual secretario de Agricultura Ganadería y Pesca de la Nación, Gabriel Delgado. “Yo siento que el agro en la provincia de Buenos Aires tiene un papel preponderante", deslizó el “bigotón”.

Felipe, el resero

Por su parte, el candidato bonaerense de UNA, Felipe Solá, sacó chapa de conocedor de las problemáticas del campo (fue ministro de Agricultura). Vestido de paisano y montando un caballo en el marco de la tradicional Peregrinación Gaucha a la Basílica de Luján, el ex gobernador, cabalgando como un resero experto, afirmó que “hay que terminar con la falsa idea que el campo es el enemigo del Estado”, agregando que, durante el kirchnerismo, el campo “es el único sector donde se habla de patrones y no de empresarios o emprendedores. Se buscó deliberadamente eliminar el diálogo, así no vamos a avanzar".

Asimismo, deslizó su propuesta de impulsar un “Plan Integral Agropecuario y Agroindustrial, con el que promoveremos la baja del maíz haciéndolo competitivo con la soja”, al tiempo que prometió la eliminación de las retenciones a los cereales de invierno, la protección al sector lechero y la supresión de los ROES (permisos para la exportación).

“Lo que intentan desde el massismo es la idea de que se produzca la siembra de maíz y la rotación de la tierra, no sólo por un tema comercial, sino por un tema de protección del suelo”, comentó a NOVA Horacio Salaverri (CARBAP) tras escuchar las propuestas de Solá en la jornada organizada por la entidad.

Asimismo, Felipe aseveró que “usaremos como se debe el Fondo Hídrico que se obtiene cuando cargamos nafta y GNC, para hacer las obras abandonadas por la actual administración Provincial tanto en la cuenca del Río Luján como en el del Salado. Vamos a mejorar las rutas provinciales y los caminos rurales, con el buen uso del impuesto inmobiliario rural".

La “chinita” Vidal

Desde el Frente “Cambiemos”, la candidata a la Gobernación María Eugenia Vidal, mientras intenta sacarse su etiqueta porteña en las recorridas por el interior bonaerense, recalcó que "con Mauricio (Macri) tenemos un plan a nivel nacional para mejorar 750 kilómetros de rutas en la provincia que se va a complementar con un plan provincial para las rutas 88 y 11 y mejorar los accesos a los puertos como Bahía Blanca y La Plata, si queremos aumentar nuestras exportaciones".

A su vez, Vidal propuso en CARBAP quitar todas las retenciones e ir bajando el 5 por ciento en soja, además de reconocer que en la provincia de Buenos Aires la presión tributaria al campo “no se puede elevar más”.

“Queremos un campo que crezca y sea puente del crecimiento de la Argentina que viene. Y queremos recuperar y fortalecer las economías regionales. Como se ve, hay una clara diferencia con el gobierno nacional", apuntó la actual vicejefa de Gobierno porteño.