De un tiempo a esta parte pareciera que, como envase desechable (y reciclable), las latas estuviesen pasando por encima del resto de los materiales existentes. Y puede ser, porque este formato va en aumento y se hace cada vez más diverso en cuanto a sus contenidos.

Según cuentan en Ball, empresa proveedora de algo así como el 90% de las latas utilizadas en Chile, este material es ventajoso por varias razones, entre ellas ser 100% reciclables, tener un menor peso pero mayor seguridad, poseer la capacidad de enfriarse más rápido, además de impedir que los rayos UV lleguen a los alimentos. En resumen, se viene la lata.

Bebidas de fantasía

Durante años fueron un objeto de deseo para millones de chilenos, que veíamos en el cine y la televisión a la gente tomar distintas bebidas de fantasía directo desde la lata. De pronto, en algún momento de los ochenta, aparecieron en nuestros comercios, pero con precios que las hacían casi inalcanzables. Sin embargo, en la actualidad están por todos lados y a la alcance de casi cualquiera.

Cervezas

Con la siempre demandada cerveza pasó algo parecido que con las bebidas gaseosas. Las latas aparecieron en los ochenta pero con precios que podían pagar solo algunos privilegiados, usándose solo en ocasiones muy especiales, como un picnic. Para todo lo demás estaba el vidrio, siempre retornable, hasta que a inicios de los 2000 los precios de los “six pack” bajaron bruscamente —en una movida de la industria para hacer masiva la lata— y el envase de vidrio comenzó lentamente a decir adiós. Y hoy, ¿quién no se toma una lata de cerveza?

¿Agua?

Si no les gustan las bebidas de fantasía o la cerveza, también pueden disfrutar de la pura y cristalina agua (con o sin gas) en lata. Menos contaminante que el plástico y más liviana que el vidrio, la lata promete convertirse en un formato cotidiano a la hora de beber agua.

También con sabor

Las aguas saborizadas son desde hace años un producto bastante popular, que de alguna manera funcionan como intermedio entre el agua embotellada y las bebidas gaseosas. De hecho, para algunos mañosos a los que se les hace muy difícil beber agua sola, son la solución para hidratarse sin recurrir a las bebidas. La buena noticia para ellos es que ahora también están en formato lata.

Listo para beber

El Spritz es uno de los cócteles que conquistó el paladar de los chilenos en el último tiempo. Ahora no solo se puede tomar ya preparado, sin complicaciones y listo para beber, sino que además se puede conseguir en formato lata con porciones individuales. Más cómodo, realmente imposible.

La Kombucha también

Esta bebida fermentada a base de té negro o verde más azúcar también está en formato lata desde hace algún tiempo. Dicen que beberla seguido, por su alta cantidad de probióticos, sirve para mejorar el funcionamiento del intestino y también del sistema inmune. Por lo mismo, vive días de alta demanda. Y aunque se puede hacer en casa o consumirla en botella, la novedad es que ahora también se puede pedir en formato lata.

¿Adiós al botellín?

Cuando se anda manejando, hay que volver a trabajar o simplemente no se quiere beber mucho, la opción a la hora de tomar vino con la comida es pedir una sola copa. Claro, esto se da —o se recomienda— en lugares con alta rotación de clientes, lo que ayuda a garantizar que las botellas no lleven días y días abiertas. De lo contrario, la alternativa hasta hace un tiempo era pedir un botellín de vino, de los que alcanzan justo para una copa. Sin embargo, ya se puede pedir —o comprar, para tener en casa— una lata de vino. Así, tal cual lo leen.

Agua tónica

La hoy por hoy tan popular agua tónica —fundamentalmente para acompañar al gin— no podía ser menos y también está en formato enlatado. En rigor, ya hace varios años que lo está, pero actualmente se puede conseguir en una variedad de marcas y sabores nunca antes vista. Además es ideal para usarla cuando uno quiere tomarse solo un gintonic, momentos en los que abrir una botella grande de tónica —que eventualmente perderá su gas— no vale la pena.

Hablando de gintonic

Bueno, además del agua tónica ahora también se puede conseguir un gintonic listo para ser bebido —ojalá siempre bien frío— en lata. Ideal para estar cerca de la piscina o incluso en un picnic sin hacerse demasiado lío, pero bebiendo con un toque de distinción.

Solo jugo

Ahora bien, si no quieren beber alcohol y solo refrescarse con un jugo de fruta, la lata también es opción. No abunda tanto como en otros formatos, pero los hay y de muy buena calidad. Solo es cosa de buscar.

Al buen sour

Nuestro querido y añorado pisco sour no podía faltar. Es cierto, hace décadas que se vende preparado en botella, con una calidad que ha ido creciendo día a día. Pero ahora ha llegado el turno del sour en lata. No queda más que probarlo.

Espumante también

Asociado a las celebraciones y la elegancia, el espumante siempre ha venido en su clásica botella de vidrio que se destapa de forma casi ceremonial. Bueno, menos glamorosa pero más práctica es su opción en lata, para así beberlo en cualquier lugar y ocasión.

Té helado

Para beberlo en cualquier lugar y momento que haga calor y la sed se haga presente, hace rato que podemos conseguir té helado —que normalmente viene en botella plástica desechable— en estas enormes latas de aluminio. Hay que aprovechar.