Los basurales a cielo abierto y el potencial de contaminación que generan son una de las mayores preocupaciones para algunos funcionarios locales y provinciales. Algunos decidieron, después de mucho tiempo, ocuparse definitivamente del tema y presentaron proyectos para que sean evaluados en los diferentes cuerpos legislativos. Los más destacados son los del Defensor del Pueblo y el de un Concejal que busca la gestión de residuos sólidos, haciendo responsables a los vecinos de la Capital.

El miércoles de la semana pasada, una de las propuestas que más resonaron en el recinto de Diputados fue la del defensor del Pueblo, Miguel Alegre. Su proyecto de ley, Gestión de Residuos Sólidos Urbanos para la totalidad de los municipios de la provincia de Corrientes, busca "erradicar en todo el territorio provincial los basurales a cielo abierto y predios de disposición final contaminantes que existen en la mayoría de las comunas correntinas".

"Sabemos que hay otras iniciativas similares y nuestra intención es que se trate de conciliar el mejor tratamiento para el sistema. Es un tema muy delicado porque en todos los municipios, incluso en Capital, existe un desmanejo en este tema, no se respetan las leyes ambientales y esperamos que le den trámite para poder discutirlo, por eso me pongo a disposición de las comisiones parlamentarias que quieran debatir el tema", dijo el funcionario.

Si bien no hay muchos detalles, en un primer paso el Defensor propone a los legisladores provinciales "debatir este proyecto e invitar a los gobiernos comunales a conformar las estructuras necesarias para ejecución de planes y/o programas de gestión integral de residuos sólidos urbanos, y al Ejecutivo Provincial a efectuar las adecuaciones presupuestarias necesarias para la instrumentación de esta proyecto". Lo que resta es esperar la respuesta de los funcionarios.

Girsu, propuesta a la espera

A la par del proyecto presentado por el Defensor del Pueblo corre en las redes sociales de la Capital una convocatoria abierta a los vecinos para ser parte activa de un programa de actividades tendiente a la Gestión Integral de Recursos Sólidos Urbanos (Girsu).

La propuesta es impulsada por el concejal de Coalición Cívica, Hugo Calvano, y el año anterior fue presentada en el recinto del Concejo Deliberante, sin embargo hasta el momento hubo pocas respuestas.

"La ciudad de Corrientes actualmente continúa utilizando un basural a cielo abierto como predio de disposición final de los residuos y que este se encuentra colapsado por la cantidad de residuos que se generan y que se depositan en el mismo. El mismo se encuentra ubicado en las cercanías de grupos habitacionales de la ciudad de Corrientes, desencadenando serios problemas hacia la salud y calidad de vida de las personas que habitan en la zona y efectos contaminantes sobre el medio ambiente", señala el proyecto disponible en la página web del edil.

La importancia de esta idea radica, según el impulsor, en el rol que se le da a cada vecino, condición expuesta de manera precisa en el documento. "La separación inicial constituye un instrumento de revalorización de los residuos y de conciencia ciudadana, donde se entiende que los residuos son responsabilidad y consecuencia de las acciones de cada miembro de la sociedad", señalan.

Paso concreto en la Terminal

Sobre la temática vale mencionar el acuerdo que firmaron hace dos semanas los titulares del Instituto Correntino del Agua y el Ambiente y la Dirección de Transporte de la Provincia.

Ambos funcionarios se comprometieron a implementar acciones para que se lleve adelante un conjunto de Buenas Prácticas Ambientales con los residuos generados diariamente en la Terminal de Ómnibus. Apuntan a que sea el primer paso de una serie de acciones similares en otros organismos públicos.

Al servicio del medio ambiente

Existen varias agrupaciones vecinales y de trabajadores que se dedican al reciclado de residuos en la ciudad. La mayoría está integrada por pequeños grupos de personas que asocian la actividad directamente al sustento diario. Sin embargo, hay otras, como la cooperativa Proyecto Fortaleza, que funcionan hace años en la ciudad con una identidad institucional propia.

Actualmente, los integrantes forman parte de varios convenios con el Municipio y la Provincia, y son uno de los pioneros en la actividad al servicio del medio ambiente.

Inconsciencia: el otro problema

Un grave problema que señalaron en reiteradas oportunidades los funcionarios a cargo de las áreas de Medio Ambiente locales y que supone la traba principal a la aplicación de este tipo de iniciativas es la falta de compromiso de parte de los propios vecinos.

"Cualquier proyecto que se intente hacer es inútil si contamos con el acompañamiento de los vecinos, que son paradójicamente los principales beneficiados. La falta de conciencia es la principal complicación", señaló en su momento el responsable del área municipal, Félix Pacayut.