La Convención provincial del radicalismo en Arrecifes fue un fracaso rotundo. La decisión queda para el cónclave nacional, donde Sánz apunta a un entendimiento con el macrismo
"Si la política es alejada de las fuerzas de las ideas, se convierte única y exclusivamente en el ejercicio del poder", señaló en su momento uno de los íconos del radicalismo, el ex presidente Arturo Humberto Illia. No obstante, en su historia reciente, la UCR ha reflejado, en el proceder de varios de sus dirigentes, todo lo contrario: en la ansiosa búsqueda por ejercer el poder, se ha visto alejada de las fuerzas de las ideas que la supieron forjar hace más de 120 años, aquellas que bien supo interpretar Raúl Alfonsín cuando señaló: "Si la sociedad argentina se derechizara, lo que la Unión Cívica Radical debe hacer en todo caso es prepararse para perder elecciones".
Tarde parece haber llegado a decodificar ese mensaje su hijo, Ricardo Alfonsín, quien tras haber llevado a su partido a digerir una alianza de neto corte electoralista con Francisco De Narváez en 2011, cambió de parecer al llamar a una mancomunión de fuerzas progresistas, afines al ideario radical, de cara a las próximas elecciones. Tarde. En el contexto de un FAUNEN envuelto en llamas, son varios los dirigentes radicales que ya no escuchan a la versión 2015 de “Ricardito” (menos aún aquella frase de su padre Raúl) y observan seducidos la posibilidad de entablar nuevos acuerdos con fuerzas que puedan poner al centenario partido en posición de concreta disputa de poder.
Más allá de las fotos entre Gerardo Morales y Sergio Massa, la inclinación, impulsada por el titular del partido Ernesto Sánz, hoy se posa en Mauricio Macri, algo que se materializó en el acuerdo que han sellado la UCR y el PRO en Entre Ríos días atrás. Bajo ese escenario, la Convención Nacional decidirá el próximo 14 de marzo en Gualeguaychú cuál será el camino a seguir: si avanza en acuerdos con fuerzas como la encabezada por el jefe de Gobierno porteño, si se apuesta a la construcción en el caldeado FAUNEN o si se da absoluta libertad de acción en materia de acuerdos en los diversos estamentos.
Un acuerdo “lo más amplio posible”
Mientras tanto, la Convención provincial del radicalismo, reunida este sábado en Arrecifes, no tomó ninguna determinación por el simple y penoso hecho de caerse por falta de quorum. De todas maneras, en varios distritos del interior bonaerense ven en Macri un potable acuerdo de “reciprocidad” bajo el cual la UCR ponga a disposición del porteño una estructura partidaria con presencia en cada pueblo, a la vez que el líder del PRO retribuya con una tracción de votos hacia candidatos locales que cualquier aspirante presidencial del seno radical no puede garantizar.
“Lo que deseamos es un acuerdo con la fuerza de Mauricio Macri", señaló a NOVAel intendente radical de General Guido, Aníbal Loubet, al tiempo que agregó: “Lo más importante para nuestro partido es tratar de lograr un acuerdo lo más amplio posible con el fin de ser una alternativa de cambio que la gente está reclamando y que si nos vamos a quedar solos dentro del radicalismo, obviamente que no vamos a ser esa alternativa”.
“Sobre todo en los distritos como el nuestro, del interior, el acercamiento con Macri es más factible porque no es un candidato peronista que siempre encuentra recelo en la comunidad como nos pasó en el acuerdo con De Narváez, que era contra natura”, consideró Loubet, quien remarcó que el titular del Comité bonaerense, Ricardo Alfonsín “ha sido de alguna manera superado en sus convicciones y sus ideas y ha quedado un poquito desvirtuada su presidencia (…) La postura que ha tenido Ricardo es contraria al deseo de una gran parte del radicalismo que hoy es mayoría”.
Ricardito sin opciones
Por su lado, y a pesar de que sus preferencias pasan por “ir con la lista 3 o con FAUNEN”, el ex presidente del Comité Provincia de la UCR y diputado Mandato Cumplido, Carlos García, remarcó a NOVA que “las cosas están encaminadas a que el acuerdo con Macri sea lo que pueda llegar a resolver la Convención Nacional” y que ese camino “si bien creo que no es la voluntad de Ricardo (Alfonsín), en estos días pareciera que no le quedaran demasiadas opciones”. Y advirtió: “El problema que está teniendo Ricardo es que se ha desvirtuado su opinión política, me parece que está trabajando en otro sentido”.
Considerando que el hecho de no tener un candidato de peso propio en Provincia “es el principal problema que tiene el radicalismo”, García también observó como una complejidad central “la mezquindad política de los dirigentes del radicalismo que prefieren acordar siempre con alguien que a hacer valer la opinión de la mayoría de los radicales”.
Libertad de acción en distritos
Desde Ayacucho, el intendente Pablo Zubiarre afirmó a NOVA que la intención de su Comité distrital es abrir “la posibilidad a entendimientos, alguna apertura que desde lo programático sea aceptable y respetando las decisiones de cada uno de los pueblos”. En la misma línea, consideró que “cada distrito es el que sabe qué posibilidades puede haber y con qué sector pueden llegar a haber acuerdos”.
Advirtiendo que el mejor camino sería otorgar libertad de acción a nivel distritos, el jefe comunal de Ayacucho observó: “Eso es un poco lo que se decidió en (noviembre pasado durante la cumbre radical de) San Fernando y contra eso no va a decir nada la Convención”, agregando que un acuerdo “con el Frente Renovador lo veo muy lejos porque es una fuerza con la cual no ha habido contacto nunca. Con el PRO sí ha habido en muchos distritos cercanía y es más fácil que se dé”. Vale recordar en este punto la visita que ha realizado meses atrás la precandidata a la gobernación bonaerense y actual vicejefa de Gobierno porteño, María Eugenia Vidal, no sólo a Ayacucho sino a varios municipios del interior provincial que están bajo la órbita del radicalismo.
Precisamente en lo que refiere a las aspiraciones por reemplazar a Daniel Scioli en el sillón de calle 6, algunos radicales ven con buenos ojos el alejamiento del massismo y desembarco al PRO de un hombre de su riñón: el intendente de San Isidro Gustavo Posse, mientras que pierde fuerza entre sus correligionarios la precandidatura del diputado nacional Miguel Bazze.
Ante este panorama, en la Convención provincial no se emitió un documento resolutivo concreto y firme en materia de rechazar o no nuevos acuerdos ya que ni siquiera se llegó al momento de debatir por falta de quorum, desprendiéndose así la pregunta sobre el nivel de influencia de “Ricardito” dentro de la estructura que conduce en el ámbito provincial.
La decisión final queda para la Convención nacional, donde otro aspirante presidencial, Ernesto Sánz, buscará consolidar el acuerdo con Macri para alimentar así su idea de una gran interna opositora en agosto con el fin de ejercer el poder, ése del que un olvidado Arturo Illia afirmaba que no tenía que estar alejado de las fuerzas de las ideas.
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