La empresa paranaense Frescor celebra el 80º aniversario del lanzamiento comercial de sus jugos. En 1943, se comercializaron de manera oficial en el mercado argentino marcando un hito en la industria de los jugos naturales ya que fueron los primeros inscriptos en el país.

“Frescor es un testimonio vivo de calidad y tradición que trasciende generaciones”, indicaron desde la firma que, en la actualidad, cuenta con 20 empleados, es decir, 20 familias tienen su sustento diario gracias a esa fuente laboral.

Por entonces, se registraron los exprimidos de limón 100 x 100 y limón azucarado, ambos con la marca Frescor. Le siguieron el de jugo de mandarina azucarado, el de naranja 100 x 100 y azucarado y por último pomelo 100 x 100 y azucarado.Sin embargo, la historia de Frescor comenzó mucho antes, su fecha de fundación data del 3 de febrero de 1896, cuando el emprendimiento recibía el nombre Almacén Los Colonos y era un punto de referencia para los vecinos de la zona. En sus comienzos, además de jugos naturales, se realizaban dulces artesanales y conservas.

Emplazada en el mismo lugar desde hace 127 años, calle Miguel Galarza de Paraná, la empresa ocupa una superficie cubierta de 4500 metros cuadrados y está profundamente arraigada en la mesa y en los corazones de paranaenses y santafesinos.“Frescor es jugo puro pero natural”Sebastián Abud y Eugenia Carponi, al frente de la firma, reflexionan acerca de lo que significa Frescor: “Con agua o con soda, generaciones enteras han compartido alguna vez un vaso de Frescor en sus mesas. Frescor evoca momentos de la infancia, reuniones familiares y en cada nuevo sorbo revivimos esa historia, cargada de sabor y nostalgia.”

“Nos llena de orgullo mantener vivo el legado. Frescor es auténtico, es calidad, es historia y un emblema de la ciudad”, agrega Sebastián.“Frescor es el encuentro de la familia, es estar el domingo sentados compartiendo una conversación, anécdotas, sentimos que eso es lo que nos conecta con los paranaenses y santafesinos”.

Como dice el conocido jingle: “Frescor es la bebida más refrescante. Con agua, hielo y soda, gusta al instante (…) Frescor es jugo puro pero natural”. En sus comienzos el jugo se obtenía a partir del exprimido artesanal del citrus y luego se incorporaron las primeras máquinas exprimidoras que se confeccionaron en el país, marca FEBO.“Frescor es legendario”Rodolfo Barinaga, empleado de la fábrica con 40 años de antigüedad, recuerda aquella época: “Contábamos con tres máquinas exprimidoras, dos naranjeras y una pomelera, cada máquina exprimía 300 frutas por minuto, aproximadamente 23 mil litros cada 4 horas.”“Frescor es legendario. En sus comienzos, además de jugo, se hacían escabeches y dulces, que salían con la marca Frescor y otros con la marca Viraró. Se elaboraban dulces de zapallo en cubos, mermelada, mamón en almíbar y dulce de membrillo que se comercializaba en cajón de 3 y 5 kilos”, evoca Rodolfo.

“Frescor es toda una vida, es como de uno, voy a extrañar el día que no venga más”, reconoce Rodolfo, próximo a jubilarse.Javier Gómez, también empleado de la planta, comenzó a trabajar en la empresa a los 19 años gracias a la recomendación de un vecino. Hoy cumple 24 años de aquel comienzo: “Cuando era chico pasaba por la entrada y se sentía el olor a fruta, a naranja exprimida. Además de ser mi fuente de trabajo, uno se pone la camiseta. Es un jugo que identifica a la ciudad”.