Ya no queda margen para la especulación política. El Frente Grande resolvió -a través de una resolución de la Mesa Provincial- que concurrirá en soledad a las elecciones municipales del próximo 1 de septiembre. Durante una reunión realizada este sábado en Bariloche, la conducción de esa fuerza a nivel provincial y local definió que presentará candidato propio a esos comicios, desalentando cualquier negociación posible con el Partido Justicialista (PJ). Así, Bariloche repite el esquema de las elecciones de 2011, cuando el Frente para la Victoria (FpV) se conformó en la Provincia, pero no en el orden local.

La determinación impactará de lleno en el proceso de transición institucional, teniendo en cuenta que el Frente Grande ostenta una primera minoría en el Concejo Municipal; y obligará al Justicialismo a apurar los plazos de definición de su propio candidato.

Si bien el Frente Grande cumplirá con la formalidad de convocar a elecciones internas para el próximo 23 de junio, la figura del edil Carlos Valeri emerge como única referencia para convertirse en candidato a Intendente. Ya lo fue en 2011, y perdió con Omar Goye, gracias al aporte que las listas colectoras hicieron al dirigente justicialista.

El PJ llevará la boleta del Frente para la Victoria, ya que es poseedor del sello correspondiente, aunque en la práctica esa alianza no esté conformada en el ámbito local.

Ayer domingo, el Frente Grande concretó su tradicional locro por el 25 de mayo. El edil Alfredo Martín descartó ante ANB que el encuentro se convierta en el “lanzamiento” de la candidatura de Valeri, y reafirmó que será “una nueva oportunidad para reafirmar nuestro acompañamiento al proyecto nacional y popular”. El gobernador Alberto Weretilneck fue invitado al acto, quien llegó pasadas las 15 al lugar.

Si bien Martín descartó el encuentro de ayer en el gimnasio de Estudiantes Unidos, sirviera de “lanzamiento” de campaña, las voces, las expresiones vertidas por Valeri, mostraron de alguna manera que ratificaban a Carlos Valeri como candidato a jefe comunal.

Fue el único que hizo uso de la palabra antes de servirse el locro, dos horas antes de la llegada del gobernador Alberto Weretilneck y, al subir al escenario, la gente gritó “se siente, se siente, Carlos intendente”. Estuvieron presentes otros dirigentes del Frente Grande de la provincia.

El momento de color lo puso un hombre, apartemente algo tomado, cuando intentó hablar Weretilneck, empezó a gritar pidiendo empleo, el hecho fue bien “gambeteado” por el gobernador, quien dijo “estamos en democracia y todos tienen derecho a reclamar y pedir y no lo vamos a sacar a este vecino con quien luego hablaremos”.

El gimnasio desbordó la capacidad y se cree que también superó las expectativas de los organizadores. Empleados municipales, dirigentes de diferentes barrios e incluso, militantes de izquierda estuvieron compartiendo el locro del 25 que ofreció el Frente Grande.