El diputado provincial de Juntos, Claudio Frangul, se refirió al proyecto que busca la dolarización de la economía como solución a la inflación, y dijo que “es un debate equivocado, tenemos que dejar de engañarnos con que puede haber una solución mágica" y recordó que "tenemos el ejemplo de lo que sucedió en los ‘90s con la convertibilidad”.

Y explicó: “Para el ‘subsidio’ al tipo de cambio fijo primero se usaron los dólares recaudados de las privatizaciones y luego directamente tomando deuda. Y eso terminó con la crisis del 2001. Hoy con una masa monetaria, incluyendo el enorme stock de letra de liquidez (Leliq), llegando a los 17,70 billones de pesos; y con reservas netas del BCRA de solo u$s 665 millones, nadie puede pensar en usar los 12000 millones de dólares de encajes bancarios porque esa es la plata de los ahorros de la gente”.

Por ello, enfatizó “nosotros impulsamos una nueva épica como fue la de la recuperación de la democracia en el ‘83, ahora para salir de la decadencia y retomar la senda del crecimiento con integración al mundo. Recrear la cultura del trabajo también implica tener una moneda respetada”.

El legislador habló sobre el impacto de la inflación en la sociedad. “El gran problema es que los índices de pobreza y desocupación que presenta el Indec son como el dólar oficial, y en la calle se está viviendo con el dólar libre. Si hubiera un sinceramiento en esas estadísticas veríamos que estamos en una situación muy preocupante”.

En ese sentido remarcó que “están contando lo que entra en un hogar por el trabajo asalariado o por un plan social sin discriminar esta procedencia. Hay familias que cuentan con un salario mínimo en blanco o un sueldo en negro que no los sacan de la pobreza, pero que con un AUH o el Potenciar Trabajar les alcanza a cubrir el ingreso familiar para no ser pobre. En realidad están debajo de la línea de la pobreza y siguen sin poder generar un ingreso”.

Frangul cuestionó los datos del Indec y aseguró que “desde el inicio de la gestión de los Fernández se ha permitido que se superpongan los programas de asistencia, y eso ayudó a esta ‘contabilidad creativa’”.

“De las cifras de desempleo que publica el Indec lo que más preocupa es que la población económicamente activa en esa medición es solo de 13,5 millones. El 49,7% en edad de trabajar, vive de otros ingresos no salariales. Y de los que no trabajan solo 900.000 desocupados están en busca de trabajo. Estamos también aquí contando la asistencia del Estado ‘como si’ fuera ocupación”, puntualizó.

Ante este escenario planteó que “apoyar a los emprendedores para que haya más trabajo privado”.

Por último, hizo hincapié en la crisis del frente gobernante, y sostuvo que “la interna del justicialismo está paralizando al Gobierno y eso le agrega incertidumbre a un contexto que ya de por sí es muy complicado en términos sociales y en términos económicos”.

“Los problemas que tenemos son urgentes y nada tienen que ver con saber si Alberto Fernández es el socio mayoritario o minoritario de la alianza justicialista que lo llevó a la Casa Rosada. A Massa y a todos los demás funcionarios del Gobierno les pediría que no sean irresponsables”.