En respuesta a una recomendación del intendente Carlos Arroyo, quien les había pedido que regresaran al Palacio Municipal para que ayer se les cancelara al menos una parte de los convenios adeudados, decenas de vecinalistas acudieron a la cita, pero terminaron retirándose con las manos vacías y con la promesa de que los pagos podrían efectuarse recién a partir del 11 de enero.

De este modo, las autoridades de unas 80 sociedades de fomento que exigen que el municipio se ponga al día, se encontraron con una nueva negativa de parte de la comuna a comenzar a saldar sus deudas, las cuales en muchos casos exceden los tres meses de demora.

Tal como se los había sugerido el jefe comunal durante una reunión mantenida este martes tras una protesta, ayer fueron varios los fomentistas que se hicieron presentes en el Palacio donde, en contra de lo que había insinuado Arroyo, desde la Secretaría de Economía se les transmitió la noticia de que no había fondos disponibles y de que no los habrá hasta dentro de dos semanas. "Esta es la sexta vez que venimos y nunca nos dan una respuesta seria", dijeron al retirarse visiblemente decepcionados.

Algunos, incluso, plantearon la posibilidad de endurecer el reclamo mediante manifestaciones públicas a partir de los próximos días. "Una cosa es la deuda y otra el manoseo y la falta de respeto a la que nos están sometiendo por puro capricho", señalaron.

Es que al hacerse presentes en el municipio y dialogar con los funcionarios, los vecinalistas se encontraron con una respuesta diferente a la que esperaban tener, en función de las palabra que les había dado un día antes el intendente.

El dirigente de la sociedad de fomento Coronel Dorrego, Rubén Escudero, le anticipó a LA CAPITAL que ante estas circunstancias, es probable que el lunes que viene el vecinalismo decida movilizarse hacia el municipio, pero esta vez para protagonizar una protesta con tractores y corte de calles.

Escudero contó que el martes, los fomentistas habían tenido "una buena charla" con el intendente, durante la cual éste había sugerido claramente que ayer la comuna podría entregarles algo de dinero a las entidades, para que así, pudieran cumplir con los pagos a sus proveedores y en especial al personal a su cargo. "Evidentemente entre la decisión política del intendente y la de algunos de sus funcionarios existe un cortocircuito. Acá no prevaleció la postura de Arroyo, sino la de un contador que aspira a tener la conducción política del municipio y a hacer valer su visión mezquina de la cosa pública", sostuvo.

Según le había explicado esta semana a LA CAPITAL la dirigente del barrio Hipódromo, Mónica Felices, las sociedades de fomento están exigiendo que el municipio pague al menos una parte de los convenios adeudados, precisando que si se tomara la decisión de cancelar la deuda de sólo un mes, el municipio debería desembolsar menos de 2 millones de pesos. "Este conflicto se resuelve con muy poca plata en función del dinero con el que cuenta el municipio. Las órdenes de pago están firmadas desde hace mucho en Hacienda, pero acá existe la decisión de no pagar", sostuvo.

Por su parte la vecinalista de Aeroparque, Cristina Stankevicius explicó que cada sociedad de fomento recibe a través de los convenios una suma promedio de 20 mil pesos al mes, los cuales son dedicados a realizar tareas de limpieza y mantenimiento en los barrios.

Según dijo, el hecho de no percibir estos fondos desde hace varios meses, provoca que las entidades carezcan de recursos para pagar los sueldos del personal a su cargo, así como los gastos de insumos y seguros. "Ya hubo familias que pasaron la Navidad sin ningún ingreso", lamentó.

Ayer Escudero comentó que durante la reunión de este martes, Arroyo advirtió que el grueso de la deuda existente no fue producida durante su gestión, sino durante la anterior. "Tiene razón. Pero le explicamos que a diferencia de lo que ocurre ahora durante el gobierno de Pulti nunca se cortó la cadena de pagos. Esa es una gran diferencia", señaló.