Por Joaquín Rodríguez Freire

Desensillar hasta que aclare. Esa parece ser la máxima que circula entre los gobernadores de Juntos por el Cambio (JxC) que el miércoles se reunieron en la sede porteña del Banco de Corrientes para blindar a la coalición opositora en medio del tembladeral que amenaza con implosionarla.

Apoyo en el territorio, reforzar la unidad y sostener los bloques en el Congreso es el cóctel que los mandatarios, vigentes y entrantes, eligieron para erigir un contrapeso a la próxima gestión nacional.

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Lejos de encuadrarse tras la decisión de Patricia Bullrich -que contó con el beneplácito de Mauricio Macri- de apoyar a Javier Milei en el balotaje, la flamante liga de mandamases cambiemitas optó por desmarcarse y jugar su propio partido, sin definirse por ninguno de los dos candidatos que competirán el 19-N.

En vez de eso usufructuarán una territorialidad creciente, que el año próximo pasará de tres provincias y la Ciudad a nueve provincias y la Ciudad.

Desde despachos amarillos comentaron a este medio que la cumbre fue homogénea ya que el objetivo en común es sostener la unidad, aunque ponderaron la formación de un nuevo polo de poder por fuera de las jefaturas de Horacio Rodríguez Larreta, Patricia Bullrich y Mauricio Macri, los tres grandes perdedores de las elecciones presidenciales. “Hay una vocación de liderar la oposición desde el interior”, remarcaron.

Al margen de sostener la coalición en los hechos, lo cierto es que cada mandatario tiene una postura personal al respecto.

La postura de los gobernadores de peso de Juntos por el Cambio

El jujeño Gerardo Morales, que acompañó a Rodríguez Larreta en su precandidatura presidencial, es el más furioso. "Juntos por el Cambio no se rompió, pero hemos dicho que Mauricio y Patricia se fueron", disparó Morales, y acusó a Macri de "trabajar para que lleguemos a esta situación". "Está feliz porque él empezó a levantar a Milei. Después, inclusive siendo Patricia la candidata, la debilitó. Está en su mejor momento”, dijo.

El gobernador saliente de Jujuy y presidente de la Unión Cívica Radical (UCR) reveló además que estuvo en contacto con Bullrich para coordinar un encuentro de JxC con el objetivo de unificar posturas rumbo a la segunda vuelta, pero denunció que la exministra de Seguridad no le anticipó su decisión de aliarse a La Libertad Avanza (LLA).

Más moderados, en cambio, se mostraron el correntino Gustavo Valdés y el mendocino Alfredo Cornejo, quien volverá a la gobernación de su provincia en diciembre.

Pese a enfatizar la necesidad de mantener a la coalición unida, Valdés sí mostró pruritos en cuanto a contener a Bullrich y Macri. Consultado acerca de si JxC incluye todavía al expresidente, contestó: "Vamos a trabajar junto a los gobernadores. Este es el espacio político que construimos, preservando los valores y el compromiso hacia el futuro. Vamos a seguir trabajando juntos los 10 gobernadores".

Cornejo, en tanto, dijo que la decisión de la titular del PRO fue personal y que cada dirigente puede tener una postura particular, aunque eso no implique JxC piense lo mismo.

Al igual que sus pares, el titular de Cambia Mendoza destacó que el país que viene necesita "acuerdos federales". "Por eso es tan importante este espacio de 10 gobernadores de un mismo espacio político, que no se va a desunir y que va a enfrentar este nuevo proceso político unido", puntualizó.

Gran ausente de la jornada, el gobernador electo de Santa Fe, el radical Maximiliano Pullaro, está en un viaje de negocios en los EEUU. Pullaro había anticipado que, en un escenario de balotaje entre Milei y Massa, su votó sería para el economista.

Ahora el exministro de Seguridad santafesino dio marcha atrás y rechazó manifestar un apoyo explícito al fundador de LLA, al tiempo que explicó al portal Letra P que defenderá el Frente Unidos para Cambiar Santa Fe.

La mesura de los gobernadores electos

Dentro de la liga los mandatarios nóveles son aquellos que muestran mayor mesura. Se trata de Ignacio Torres (Chubut); Marcelo Orrego (San Juan); Carlos Sadir (Jujuy); Claudio Poggi (San Luis); Leandro Zdero (Chaco); y Rogelio Frigerio (Entre Ríos).

Desde el entorno de algunos de ellos manifestaron que sus mayores preocupaciones estarán vinculadas a la gestión en sus provincias y al cuidado del pago chico. Es que, a diferencia de la debacle nacional, JxC gobernará el año próximo casi la mitad de las distritos.

Nacho Torres, gobernador electo de Chubut.

En las últimas horas, el puntano Alberto Rodríguez Saá hizo un llamado a la oposición para dialogar sobre la unidad en San Luis. Esa convocatoria incluye al electo Poggi. “Lo llamo a dialogar por cuestiones provinciales. Le digo al gobernador electo y líder de una importante fuerza política de la provincia, que está invitado a dialogar y que ojalá acompañe a Massa", dijo Rodríguez Saá.

El nuevo esquema de poder incluirá cinco gobernadores radicales (Cornejo, Sadir, Valdés, Pullaro y Zdero), tres del PRO (Torres, Frigerio y el jefe de Gobierno, Jorge Macri) y dos que proceden de tradiciones diversas (Marcelo Orrego y Claudio Poggi).

Ahora el flamante colectivo de gobernadores se presenta como un factor de poder de peso dentro de la coalición opositora. Tendrá, además, que hacer equilibrio ante una futura gestión nacional que contará con la chequera y la administración de los recursos federales.