Cuatro chicas de entre 20 y 25 años, fueron encontradas en situación de explotación sexual en una casa ubicada en el primer piso de Garibaldi 133 (a metros de la calle Moreno) en Quilmes Centro en un allanamiento realizado por Gendarmería Nacional y el el titular de la Fiscalía Nº1 de Berazategui (especializada en trata de personas), Daniel Ernesto Ichazo.

En el lugar, que funcionaba como prostíbulo desde hace al menos dos años atrás, fue detenida una mujer por “promoción y facilitación de la prostitución”. Eran obligadas a estar con los clientes que se presentaban en Garibaldi 133 y debían dejar a quienes las explotaban el 60% de la cifra que cobraban. Además, en caso de ausentarse, si no presentaban un certificado médico por enfermedad, debían pagar una multa (que oscilaba entre los $100 y los $150). Los clientes abonaban $100 por quince minutos y $200 por una hora.

En tanto, en la vivienda de Andrés Baranda 1164, entre Islas Malvinas y Carlos Pellegrini, de Quilmes Oeste, se encontraron cinco jóvenes ejerciendo la prostitución.

Resulta extraño, cómo no se realizan este tipo de allanamientos en "El Harem", ubicado en Av. La Plata al 3600, frente a una estación de servicio, dado que es de público conocimiento que allí se ejerece la prostitución.

Cabe añadir, que las chicas son consideradas como víctimas por la Justicia y desde la Oficina de Rescate y Acompañamiento a Personas Damnificadas por el Delito de Trata (dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos), se las acompaña en la búsqueda de que logren alternativas al sistema prostibular en el que se encuentran atrapadas.