El séptimo día de audiencia de la causa que investiga cuatro casos de desaparición forzada en la Masacre de Margarita Belén imputados al excapitán de Inteligencia de Ejército Norberto Tozzo tuvo como protagonista excluyente el alegato del Ministerio Público, que fue realizado por los fiscales Diego Jesús Vigay (fiscal ad hoc en DD HH) y Carlos Martín Amad (fiscal general subrogante).

Si bien hubo cruces entre el tribunal y las partes respecto del tiempo asignado para la exposición, se logró consensuar una prórroga en los alegatos y se espera que durante la mañana del jueves el fiscal Patricio Sabadini finalice el alegato del Ministerio Público con la tipificación y el pedido de pena. Luego la causa pasará a cuarto intermedio hasta el 4 de agosto, día en que serán escuchados los argumentos de la defensa oficial que ejerce el doctor Juan Manuel Costilla.

Diego Vigay hizo foco en el activo rol del área de Inteligencia militar en la planificación del fusilamiento, con Tozzo como protagonista en la confección de la lista de los presos políticos que fueron fusilados el 13 de diciembre. "Está absolutamente probada la participación de Tozzo en las operaciones encubiertas, y su opinión en la ejecución de hechos como la Masacre fue determinante" afirmó.

El fiscal Carlos Amad hizo detalló los pormenores del operativo de "traslado" y enumeró las razones y los indicios que contradicen el supuesto "enfrentamiento", versión que además fue completamente desechada en el anterior juicio por la Masacre en el que se condenó a prisión perpetua a 8 militares.

Jorge Auat, titular de la Unidad Fiscal de Coordinación en causas por crímenes de Lesa Humanidad, participó en el alegato con el marco histórico de la causa Masacre; denunció la "complicidad del sistema judicial con la impunidad de los represores" y señaló a los jueces de la Cámara Federal de Resistencia Tomás Inda y María Beatriz Fernández, como los responsables de la fuga de Tozzo luego de que le concedieran la libertad en base a un Hábeas corpus en 2003 que dejó sin efecto una orden de captura emitida por la Justicia Federal (Tozzo aprovechó la oportunidad y huyó a Brasil, donde permaneció prófugo hasta el 17 de septiembre de 2008). "Esta causa está teñida de impunidad, y nace con ese grosero Hábeas corpus" sostuvo Auat, que reclamó al tribunal que se considere las profundas implicancias sociales que atraviesan a la "tragedia de Margarita Belén".

EL ÁREA DE INTELIGENCIA

El fiscal Diego Jesús Vigay describió el funcionamiento del Área de Inteligencia y el papel de Tozzo en las operaciones clandestinas llevadas acabo desde el Destacamento 124, con jurisdicción en toda la región."Está absolutamente probado que Tozzo armó la lista de detenidos que serían fusilados y que planificó el fusilamiento del 13 de diciembre" afirmó Vigay, que se basó en el cotejo de pruebas documentales, y testimonios de diferentes testigos de la causa.

Vigay remarcó la importancia de un escrito de ocho hojas presentado por el propio Tozzo en 1980 en el que el militar declara haber intervenido en el asesoramiento y ejecución de numerosas "actividades especiales de Inteligencia", desde operativos clandestinos, interrogatorios y detenciones a opositores políticos.

"Tozzo nunca contradijo esto en ninguna de sus posteriores declaraciones" explicó el fiscal, que leyó varios párrafos del documento, mientras un Tozzo se mostraba visiblemente contrariado porprimera vez en el juicio. Fue tal su enojo que el juez García Wenk lo apercibió diciéndole que si tenía algo para decir sobre el tema podría hacer uso de ese derecho en el momento oportuno.

Vigay continuó con el análisis del texto en cuestión: "Todo lo que dice Tozzo en ese documento se corresponde plenamente con las documentales, los testimonios de sobrevivientes y otros testigos y aún con el legajo del imputado" graficó.

Especial atención mereció uno de los párrafos finales en el que Tozzo cuenta que en una oportunidad llegó a exponer personalmente "una situación" a los generales Díaz Bessone y Nicolaides: "Alrededor de las 22.30 horas, asesorándolos para que luego se tomara una resolución que comprometiera a la Fuerza y al Gobierno PRN (Proceso de Reorganización Nacional), siendo posteriormente uno de sus ejecutores".

El análisis del fiscal al respecto fue concluyente; "Indudablemente entendemos que se refiere a una reunión de Inteligencia, en la que se explicó a los jefes del Segundo Cuerpo de Ejercito Díaz Bessone y Nicolaides cómo se realizaría el fusilamiento del 13 de diciembre y quiénes serían los presos políticos asesinados" expresó.

"LA COARTADA DEL TERRORISMO DE ESTADO"

EL martes en la jornada precedente alegaron las querellas representantes de familiares, de la Liga Argentina por los Derechos del Hombre y la Secretaría de DDHH de la provincia, con pedidos de 24 años de prisión para Tozzo, por la privación ilegítima de la libertad agravada en cuatro hechos en concurso real.

Los "hechos" son las desapariciones de los fusilados Fernando Piérola, Roberto Horacio Yedro, Reynald Zapata Soñez y Julio Andrés Pereyra, todos ellos presos políticos asesinados el 13 de diciembre de 1976 en cercanías a la localidad de Margarita Belén.

Por escasez de tiempo, la Fiscalía no pudo realizar el pedido de pena, por lo cual su alegato será completado durante la mañana del jueves. Hacia el final de la jornada el Tribunal que integran los jueces Alfredo García Wenk (presidente) y Rubén David Quiñónez junto con la jueza Selva Angélica Spessot, de la Cámara Federal de Corrientes concedió unas palabras finales a Jorge Auat, que objetó la versión castrense de los hechos y explicó el papel que tuvieron las desapariciones que son objeto de investigación en la causa.

"El diseño de un plan criminal lleva también el diseño de una coartada para asegurar la impunidad del crimen, estos cuatro desaparecidos son los rehenes que los asesinos necesitaron para montar la escena de una enfrentamiento" sostuvo el jefe de fiscales en causas por crímenes de lesa humanidad en todo el país, y agregó; "Las desapariciones forzadas como las de la Masacre fueron la coartad el jefe de Fiscales a del terrorismo de Estado, y formaron parte del plan criminal cuya dimensión de horror es difícil de cuantificar".