Sin vueltas, el fiscal federal Luis Comparatore acusó al juez Norberto Oyarbide de tener un tren de vida de “lujos exorbitantes e imposibles de ser afrontados con el sueldo de un magistrado”.

La acusación quedó en la causa en se lo investiga por la compra de un anillo de brillantes cuyo valor se estimó en 250 mil dólares .

Sin embargo, el fiscal luego de lanzar esa acusación pidió ser excusado de seguir interviniendo por “violencia moral” y “destrato” de parte del magistrado.

En enero se supo que Oyarbide había adquirido ese costo anillo gracias, dijo, a “la venta de regalos que le obsequiaron en los últimos cinco años” y la revista Noticias fotografió al juez en una exclusiva playa de Punta Cana, República Dominicana, donde habría gastado, junto con su pareja, unos 34.500 dólares.

La denuncia por supuesto enriquecimiento ilícito la hicieron, por separado, el sindicalista bancario Juan José Zanola, la diputada Patricia Bullrich y un abogado tucumano y recayó en el fiscal Comparatore, quien en junio pidió una serie de pruebas.

Sin embargo, ahora el fiscal pidió dejar la causa del anillo porque sostuvo que Oyarbide lo acusó “en forma falaz y por demás artera de pretender dilatar el trámite” de otro expediente en el que ambos investigan la confección de pasaportes falsos para futbolistas.

En una resolución difundida por DyN, el fiscal agregó: “Ante semejante cuadro, el análisis de la ilicitud de los lujos exorbitantes e imposibles de ser afrontados con el sueldo de un magistrado de esta instancia que se le atribuyen a un funcionario que me ha ofendido en la medida consignada, se torna imposible en las condiciones en que lo exige el desempeño de mi ministerio”.

Ahora el juez federal Sergio Torres deberá decidir si aceptar que Comparatore deje la causa del anillo y se designe a otro fiscal.

Oyarbide ya tiene una causa abierta por supuesto enriquecimiento ilícito ante el juez de instrucción Guillermo Rongo. Data de 1998. En esa causa se lo imputó porque “desde enero de 1996 hasta julio de 1998 Oyarbide sobrepasó en exceso pagos efectuados (con tarjeta de crédito) por distintos conceptos, el sueldo por él percibido, lo que evidencia la existencia de un patrimonio oculto e induce a pensar acerca del posible enriquecimiento patrimonial no justificado”. Como tiene fueros en esa causa están esperando que se jubile o hipotéticamente lo destituyan en la Magistratura, donde la mayoría kirchnerista lo salvó dos veces. De la misma forma, que el menemismo votó en contra de su destitución en el Senado en el 2001 por el escándalo de Spartacus.