El titular de Femsa advierte sobre la necesidad de ofrecer oportunidades a poblaciones vulnerables.
Para el empresario José Antonio Fernández, las empresas del país deben iniciar un proceso de inclusión para llenarse de cultura y valores, tal y como lo hace Femsa con su programa de Inclusión laboral de refugiados en las tiendas Oxxo. La idea, dijo, el empresario es que "si alguien puede generar valor a una compañía, esa persona debería poder aspirar a un puesto en ella".
En su columna publicada en el matutino La Jornada y titulada "Con las puertas abiertas" , el presidente del Consejo de Administración de Femsa explicó que, desde 2019 implementó en la firma el proyecto de inclusión laboral, tras conocer a un joven turco en Estados Unidos con una gran visión de negocios, que, contrataba a migrantes.
Fernández señaló que Femsa se unió a la alianza del empresario extranjero y se contrató a personas de Cuba, El Salvador, Guatemala, Haití, Venezuela, entre otros países más. El directivo agregó que con dicho proyecto contribuyen a hacer frente a un problema humanitario que se prevé continuará por años.
"Es una realidad bien probada, que las compañías inclusivas y diversas generan 35% más valor que aquellas que aún no adoptan esta filosofía. Nuestros clientes y consumidores valoran hoy más que nunca que las empresas seamos parte de iniciativas tan sensibles e incluyentes. Creemos firmemente que, si alguien puede generar valor a una compañía, esa persona debería poder aspirar a un puesto en ella sin importar su estatus migratorio, su país, nacionalidad, edad, religión o género", señaló.
El empresario concluyó su mensaje pidiendo a otras compañías del país a unirse a dicha práctica de inclusión para hacerle frente a problemas como la deserción escolar, la delincuencia, y otros problemas derivados de la falta de oportunidades.
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