El gobierno nacional, representado por el ministro del Interior Rogerio Frigerio (h), junto a autoridades del Ente Nacional de Obras Hídricas y de Saneamiento (ENOHSA) y el intendente Facundo Prades, firmaron ayer el convenio de traspaso de la Planta de Osmosis Inversa, por lo cual el municipio caletense se transforma en propietaria del complejo industrial destinado a trasformar en potable el agua de mar.
El acto tuvo lugar a media tarde en uno de los salones de la Casa Rosada y ahora se espera que se cumpla el compromiso asumido por la gobernadora Alicia Kirchner, cual fue el de financiar los costos de finalización de las obras con fondos del programa UNIRSE, previo licitación de los trabajos.
Vale señalar que el ministro Frigerio estuvo acompañado por el secretario de Infraestructura y Política Hídrica, Pablo Bereciartúa; el administrador del ENOHSA, Luis Jahn; y el subadministrador del mismo organismo, Alejandro Ávila Gallo.
Por su parte, el jefe comunal asistió junto al diputado por municipio, Sergio Bucci, y el secretario de Planificación, Mauro Zacarías.
Al concluir el acto, Prades reiteró que el convenio será remitido al Concejo Deliberante para que la obra sea incluida dentro del patrimonio de la localidad y precisó que la planta está valuada aproximadamente en un presupuesto anual del municipio; es decir en alrededor de 2.000 millones de pesos.
“Este es el resultado de un trabajo que llevó bastante tiempo y hoy se vio plasmado en el traspaso. Logramos desatar este nudo que se había armado a partir de tantas cosas que han pasado y se han hablado”, sostuvo el intendente.
Por otra parte, comentó que en el país hay tres empresas que se encargan de este tipo de obras y que la misma “constituye una solución más que importante a la falta de agua”.
“Consecuentemente –afirmó- tenemos que estar tranquilos porque la Planta de Ósmosis Inversa ya es nuestra, de nosotros como funcionarios y de los vecinos en su totalidad”.
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